Las moscas de la fruta, también conocidas como drosófilas, son atraídas por el aroma de frutas maduras o en descomposición. Su presencia en la cocina suele indicar que hay algún alimento abandonado o en proceso de fermentación cerca. Una vez que aparecen, pueden multiplicarse rápidamente y ocupar áreas como encimeras, fregaderos o fruteros.
Sin embargo, con una sencilla trampa casera, es posible deshacerse de ellas sin necesidad de productos químicos ni soluciones costosas. A continuación, te explicamos cómo hacerlo:
Materiales necesarios:
Un frasco de vidrio (puede ser uno reciclado, como de conservas).
Una hoja de papel común.
Cinta adhesiva.
Un trozo de fruta (como plátano, manzana o incluso una cáscara de mandarina).
Instrucciones para montar la trampa:
Coloca un trozo pequeño de fruta dentro del frasco. El olor dulce de la fruta en descomposición será irresistible para las moscas, convirtiéndose en el cebo perfecto.
Con la hoja de papel, forma un embudo. Asegúrate de que el extremo más estrecho sea lo suficientemente pequeño para que las moscas puedan entrar, pero no salir.
Usa cinta adhesiva para fijar el embudo y evitar fugas. Ajusta el embudo a la boca del frasco y corta el exceso de papel para que quede bien encajado.
Coloca el frasco en un lugar estratégico de la cocina, donde observes mayor actividad de moscas.
Cómo funciona la trampa:
Las moscas entrarán atraídas por el olor dulce de la fruta, pero la forma del embudo les impedirá salir. Para eliminarlas, puedes agregar un poco de agua al fondo del frasco, lo que facilitará deshacerte de ellas. También puedes usar un insecticida natural si prefieres una solución más rápida.
Para obtener mejores resultados, distribuye varias trampas en diferentes puntos de la cocina y reemplaza el trozo de fruta y el embudo cuando sea necesario. Esta técnica, además de ser simple y económica, es una alternativa ecológica y libre de productos químicos agresivos, ideal para mantener tu hogar limpio y saludable.
Más sobre las moscas de fruta
Según la Universidad de Kentucky, las moscas de la fruta, comunes en casas y negocios, son atraídas por frutas y verduras maduras o en descomposición, especialmente al final del verano y en otoño. También proliferan en productos como bananas, cebollas o patatas fuera del refrigerador. Estas pequeñas plagas miden unos 3 mm, tienen ojos rojos y un cuerpo de tonos marrón y negro. Las hembras pueden poner hasta 500 huevos cerca de superficies húmedas y alimentos en fermentación, y su ciclo de vida completo es de apenas una semana.
Las infestaciones suelen originarse en trituradores de basura, botes mal limpiados, derrames de jugos o alimentos fermentados. También pueden ingresar desde el exterior a través de ventanas o puertas mal selladas. Aunque son mayormente una molestia, las moscas de la fruta pueden contaminar los alimentos con bacterias.
Para prevenirlas, se recomienda consumir o refrigerar las frutas y verduras maduras, limpiar derrames y eliminar productos en mal estado. Las personas que preparan conservas o bebidas caseras deben sellar bien los recipientes. Además, instalar mallas de buena calidad en puertas y ventanas ayuda a mantenerlas fuera de casa.
En Directo al Paladar México también puedes leer: Por qué aparecen las moscas de fruta y qué son
Ver 0 comentarios