Hacer helado puede parecer muy sencillo, sin embargo, lograr que quede con una textura cremosita es una labor que solo pocos conocen. Así que hoy te compartimos siete trucos caseros para hacer helados cremosos. Conoce los tips que te ayudarán a elaborar este postre rico y muy fácil.
Para lograr que el helado casero quede cremoso y suave, te compartimos los siguientes consejos:
Utiliza una receta de Directo al Paladar México: Asegúrate de seguir alguna de nuestras mejores recetas para hacer helado cremoso:
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Usa leche o crema: Opta por agregarle leche entera en lugar de leche descremada, y usa crema espesa en lugar de crema ligera. Esto aumentará la cantidad de grasa en el helado, lo que contribuirá a su cremosidad.
Agrega azúcar u otros edulcorantes: Estos productos en grandes cantidades pueden facilitar la textura cremosa en el helado, pero se recomienda que su porción no rebase un 18% del total de todos los ingredientes.
Incorpora aire: Durante el proceso de batido de ingredientes, asegúrate de darle unos segundos extra para que el aire se pueda incorporar. Puedes hacerlo de forma manual, utilizando un batidor de globo. No batas en exceso, ya que esto puede introducir demasiado aire en la mezcla y afectar su textura.
Cuidado con el recipiente: Se sugiere colocar la mezcla de ingredientes de tu helado en un recipiente ancho para que la capa sea fina y pueda facilitar su congelamiento. También puedes transferirlo a un recipiente hermético y colocarlo en el congelador.
Congelamiento adecuado: Después de mezclar los ingredientes y vaciarlos en un recipiente, deberás refrigerar la mezcla en el refrigerador durante al menos unas cuatro horas, o incluso dejarlo toda la noche. Esto permitirá que los sabores se mezclen y que el helado se enfríe por completo.
Cuidado con el recipiente: Se sugiere colocar la mezcla de ingredientes de tu helado en un recipiente ancho para que la capa sea fina y pueda facilitar su congelamiento. También puedes transferirlo a un recipiente hermético y colocarlo en el congelador.
Remueve durante la congelación: Si te es posible, cada media hora aproximadamente, remueve el helado en el congelador con una cuchara o una batidora de mano. Esto ayudará a romper los cristales de hielo y a mantener la textura más suave y cremosa que deseas, ya que evitará la formación de cristales. Asegúrate de envolver el helado con una película de plástico que esté en contacto directo con la superficie del helado para evitar la exposición al aire.
Recuerda que la temperatura y la humedad del congelador también pueden afectar la textura del helado, así que asegúrate de mantenerlo a una temperatura constante y evitar cambios extremos de la temperatura.
Ahora sí, ya puedes presumir que sabes preparar helados cremosos. Puedes personalizarlos con tus ingredientes favoritos, como trozos de chocolate, frutas secas o nueces.
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