El sushi es una delicia japonesa a la que uno nunca puede negarse. Es una comida tan versátil, ligera y sana, que en serio sería bueno que formara parte de nuestras dietas cotidianas de todas las semanas.
Ir por sushi a una restaurante es toda una experiencia. Elegir es difícil, lo sabemos. Pero como muy probablemente tienes tus recetas favoritas te invitamos a que las prepares de forma sencilla y muy segura desde la comodidad de tu cocina. Es bastante fácil y te dará una libertad creativa que tu paladar y tus comensales agradecerán.
Hoy te presentamos sushi de camarón, tofu y aguacate que va perfecto con la temporada. ¡Si puedes, acompáñalo de un buen vino blanco o un vasito de sake!
Coloca todo el arroz en un bowl grande y agrega agua fría. Lava el cereal hasta que el agua ya no salga blanca, sino cristalina.
Luego mueve el arroz en una cacerola mediana con dos tazas de agua y ponlo a fuego alto. Una vez que empieza a hervir baja el fuego a lo mínimo y tapa para que siga hirviendo por 15 minutos.
Luego quita de la flama y deja que el arroz repose tapado durante 10 minutos tapados.
En una taza grande combina el vinagre de arroz, una pizca de azúcar y sal, y mételo al microondas por medio minuto.
En un bowl distinto, pero de preferencia de cristal, pon el arroz y vacíale encima la mitad de la mezcla caliente con vinagre. Luego revuelve y agrega la otra mitad de líquido.
Deja enfriar por 10 minutos.
Coloca un makisuki (el tapetito hecho de bambúes que se usa para darle forma al sushi) y encima pon una hoja de nori.
Pon una cama del arroz —que no sobrepase un centímetro de grosor— sobre la alga extendida y asegúrate que quede uniforme. Rocíale el ajonjolí tostado.
En el borde más cercano a ti agrega el tofu en tiras, así como el aguacate en rebanadas, julianas sin semilla de pepino y camarines enteros a todo lo largo.
Ve enrollando la preparación y siempre pon atención en hacerlo firmemente. Si no, cuando cortes el rollo se te va a deshacer o deformar. Tú decides si lo haces en forma circular, cuadrada o hasta triangular.
Moja un cuchillo que esté muy filoso y corta los rollos en 6 o 7 tajadas.
Acomódalos en platos o bandejas extendidas y sirve con pequeñas porciones de wasabi, así como salsa de soya en cuencos.