La Organización de las Naciones Unidas (ONU) asegura que más de dos mil millones de personas carecen de acceso a alimentos saludables. Lo cual tiene muchas implicaciones, pero principalmente la que implica sufrir graves problemas de salud.
A propósito de esto Cindy Holleman, quien es economista principal de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y editora del informe Si solo nos centramos en el hambre, nos estaremos perdiendo muchos de los problemas crecientes que estamos viendo, hay que ver justamente mucho más allá solo la precariedad alimenticia, ya que hay muchos problemas aparejados que no solo se circunscriben a la falta de comida.
Según dice, actualmente hay más personas hambrientas que obesas en el mundo. Esto se nota principalmente en África, partes del Medio Oriente y en América Latina y el Caribe, según un informe publicado por la misma FAO.
Además, según Holleman, los choques económicos están contribuyendo a prolongar y empeorar la gravedad de las crisis alimentarias causadas principalmente por conflictos y crisis climáticas.
El veredicto de esta organización dependiente de la ONU es que los gobiernos deben prestar más atención a los diferentes aspectos de la disponibilidad de alimentos, en lugar de centrarse en producir. Esto, debido a que según ellos las instituciones internacionales están muy orientadas hacia el lado de generar más y más.
Según Holleman: "No estamos mirando la distribución, los mercados, el comportamiento de la gente, la cultura de la gente". Entonces, pensar en el acceso a la comida saludable debe verse desde muchas más aristas desde sólo desde el hambre. Es un asunto complejo, al que hay que darle atención desde una perspectiva que abarque muchos más aspectos.
Fuente: Al Jazeera