Esta época de lluvias es perfecta para preparar todas las recetas que estuvimos postergando durante las oleadas de calor extremo. Es hora de preparar caldos, guisados calentitos y bebidas calientes para iniciar y terminar el día. Hoy es el turno de esta receta fácil de atole de avena y canela.
Lo mejor de esta receta es que lleva pocos ingredientes, puede ser sin azúcar y queda perfecto para iniciar o despedir el día, incluso para las reuniones familiares porque todos te van a pedir la receta.
Ideas para endulzar este atole
Si te gusta experimentar con endulzases artificiales puedes agregar eritriol o stevia en polvo.
El mejor sustituto del azúcar cuando se trata de atoles es el piloncillo, ya sea el de tapón o el de tamaño normal, lo mejor es irlo agregando de poco a poco para no excederte de dulzor.
La miel pura también es una buena opción cuando se trata de preparar cantidades pequeñas, porque seamos realistas, si preparas 10 litros de atole, tal vez sea mejor opción descartar la miel.
Al igual que la miel, si preparas porciones pequeñas, puedes optar por endulzar tu atole con cajeta o dulce de leche. Esto le dará un toque ligero, pero lo suficientemente dulce para disfrutar.
La vieja confiable para la mayoría de los atoles es agregar una o dos latas de leche condensada y con eso es más que suficiente, según la cantidad de atole que se prepare.
¿Qué hay de la esencia de vainilla? Como tal no va a aportar dulzor, aporta más esencia al menos que sea una especie de jarabe espeso, ahí podría estar mezclado con un endulzan artificial.
Con qué tipos de leche se puede preparar el atole de avena
Mi opción favorita (como intolerante a la lactosa) es la misma leche de avena, esta leche le aporta una consistencia ligeramente espesa a todas las bebidas calientitas.
La leche entera es la opción de cajón ante cualquier atole, aunque no la más amigable con todos los estómagos.
La leche de soya también es una buena alternativa, sobre todo porque este tipo de bebidas suelen estar un poco endulzadas.
La leche deslactosada es una opción adecuada para los intolerantes a la lactosa, además esta ya viene un poco endulzada por la lactasa que se le añade para poder ser consumida. Para algunas personas este nivel de azúcar es suficiente.
Calienta la leche a fuego medio bajo con la taza de agua, la raja de canela y la leche semidescremada. Remueve constantemente para evitar que se pegue la leche.
Si notas muy espesa la mezcla, agrega otra taza de agua y continúa removiendo. Agrega la avena molida y continúa removiendo a fuego bajo.
Pasados 5 minutos de haber agregado la avena, agrega la leche condensada y deja que todos los sabores se integren a fuego bajo. Deja cocinar unos 10 minutos más y listo.
En Directo al Paladar México también puedes leer Riquísimo champurrado con chocolate, masa y piloncillo para los días lluviosos
Ver 0 comentarios