No sé a ustedes, pero a mi aún me gusta coleccionar objetos de cocina que no utilizaban energía eléctrica, tales como metates, molcajetes, etc. Y objetos como cucharas y palas, ollas y demás utensilios que las cocinas antiguas disponían de forma artística en sus paredes y techos, así, les dejo esta primera parte, porque existen muchas curiosidades y artículos maravillosos que aún hoy se utilizan, y son muy cotizados..
¿Quien no ha visitado un museo para conocer lo que eran las cocinas antes y después de la conquista? En las casas y conventos, los espacios para cocinar, ostentaban diversos objetos, que a veces no identificamos en sus usos. Hablaré de los utilizados en las cocinas de zonas rurales, a la fecha.
El zarzo
Este objeto, del que poco se conoce, al menos por su nombre, se hacía con mecate y carrizos o petate, y se colgaba del techo, generalmente de una viga de madera fuerte, para almacenar alimentos que de estar en zonas de fácil acceso, eran atacados por animales.
Su funsión también era la de airear o secar alimentos, tales como quesos, chorizos y longanizas para envejecerlos y permitir que se conservaran por más tiempo.
Un pequeño altar
¿En qué cocina podía faltar un altar? Cuando los españoles vinieron a catequizarnos, era impensable que en una casa "decente", faltara uno dedicado al santo favorito o incluso, varios altares en zonas cruciales y bien vistas por todos, con la imágen y veladoras al "Santito".
En este caso, se observan también unas palmas benditas ya secas, que no faltaban cerca de algún calendario, puerta o a los lados del altar.
Calendarios
¿Y quien no recuerda las imágenes de estampas mexicanas de Jesús Helguera en las casas de las abuelas? Hoy son consideradas verdaderas obras, y tener una imágen de Helguera es una suerte de gran valor, tanto cultural como económico. A mi me encantaban esas imágenes mexicanas, que en realidad, no llegué a conocer en aquel entonces; pero soñaba con ser la dama de las trenzas oscuras, detrás de los barrotes de la ventana, escuchando la serenata del guapo charro mexicano al pie de su caballo, y rasgando las cuerdas de su guitarra.
Charolas
Al igual que los calendarios de cigarreras, refresqueras, talleres, abarrotes, mercados o farmacias, las charolas eran litografias de estampas o personajes, como el pato Donald y el refresco Pascual, de Boing, y siempre se contaba con más de una en las cocinas, y es que estas se regalaban a las amas de casa en la compra de cada tanto del producto anunciado en ellas.
Comal y bracero o fogón
En muchos lugares, por no decir que en toda la República Mexicana, aún se utilizan los fogones y comales. Muchos de estos emplean leña, que es la más simple de recolectar en las zonas rurales. Los comales, van desde los tradicionales de barro, los de hoja de lata o aluminio, a los pesados comales de hierro.
Y dejamos el tema para una segunda parte, porque nos faltan las tinajas, huajes, utencilios, sopladores etc. Pero en Directo al Paladar, como siempre, les dejo el enlace de otras tradiciones mexicanas, esta vez, sobre bebidas, las que tumban, primera parte, y algo muy mexicano y utilizado, Algunos de los chiles más picantes de México.
