Si eres de esas personas que inicia su rutina a medio día: desayunas, comes y cenas tarde, puede que esta información que estamos a punto de compartirte sea muy importante para ti. Seguro te pasa que sientes hambre todo el tiempo, que tienes antojos de cosas dulces, saladas y monchosas cada dos por tres y se te complica bajar de peso. Todo esto podría estar sucediendo por comer tarde, te explicamos por qué.
Expertos identificaron que comer más tarde en el día aumenta las probabilidades de tener más hambre y sentirte menos satisfecho a lo largo del día, según información que se publicó en este estudio de la revista académica Cell Metabolism. Los datos recabados en la investigación explicaron que en realidad la hora en qué comemos puede interferir en los niveles de hambre, la forma en que quemamos calorías y la manera en que almacenamos grasa.
"En conjunto, estos cambios pueden explicar por qué comer tarde se asocia a un mayor riesgo de obesidad, según otros estudios y proporcionan una nueva visión biológica de los mecanismos subyacentes". explicó Nina Vujovicm, investigadora de la División de Trastornos Circadianos y del Sueño del Hospital Brigham and Women's de Boston.
Esto sucede porque nuestro cuerpo funciona en torno a los llamados ritmos circadianos que dividen el día en diferentes fases: la actividad física, el sueño y la alimentación están íntimamente reguladas por este principio y por esta razón es muy importante cumplir con horarios, ya que alterarlos (como comer a deshoras o dormir muy poco o en exceso) puede alterar nuestro metabolismo.
Comer a deshoras puede afectar nuestro metabolismo
Nuestra salud está sostenida por una multiplicidad de factores; pero uno de los más importantes es la alimentación. Bien se dice que 'somos lo que comemos' y en definitiva mantener una alimentación saludable y tomar mucha agua nos ayudará a mantenernos en un estado óptimo de salud. Sin embargo, comer bien no se resume a ingerir alimentos balanceados y nutritivos, también tiene que ver con comer a horas adecuadas y en las porciones correctas.
Creo que todos podemos estar de acuerdo al decir que el estilo de vida tan frenético y acelerado al que estamos sometidos día a día no nos hace las cosas muy fáciles: tenemos que estar corriendo todo el tiempo, entre el trabajo, la familia, las responsabilidades del hogar y mantener nuestras relaciones interpersonales sanas parece que nos queda muy poco tiempo para comer a las horas adecuadas; pero esto puede tener consecuencias para nuestra salud. Por esta razón es importante fijar un horario para las comidas y hacer un esfuerzo por cumplirlo.
Un estudio de control estricto en horarios de alimentación
Un nuevo estudio analizó esta cuestión comparando a personas que comieron los mismos alimentos, pero a diferentes horas del día. Se realizó con un grupo pequeño de 16 personas que presentaban sobrepeso y obesidad; se analizó la forma en que sus horarios de alimentación podía inferir en tener un mayor riesgo de aumento de peso y de sentir hambre más seguido.
Todos los participantes en el estudio siguieron un estricto horario de sueño y vigilia durante unas tres semanas y recibieron comidas preparadas a horas fijas durante tres días antes de comenzar el experimento de laboratorio.
Los resultados arrojaron información interesante: descubrieron que las ganas de comer se duplicaron cuando alguien comía más tarde o seguía un régimen de 'comidas nocturnas', además presentaron más antojos de alimentos salados, con almidón y carne.
Al observar los resultados de los análisis de sangre, los investigadores descubrieron que al comer a deshoras se suele disminuir los niveles de leptina, una hormona que nos genera una sensación de saciedad. En la misma línea, los niveles de la hormona grelina, que despierta nuestro apetito, aumentaron. Frente a las personas que comieron en un horario estable y más temprano, que mostraron niveles más estables de estas hormonas.
Además, los participantes del experimento comían más tarde quemaban calorías a un ritmo más lento que cuando comían a horas más tempranas. Por lo tanto, el comer a deshoras podría estar claramente relacionado con un aumento de peso y una capacidad limitada para regularlo.
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