El Coronavirus nos tiene preocupados a todos. En varios países prevalecen estados de alerta y cuarentenas, oficiales y voluntarias, que han obligado a millones de personas a resguardarse en casa para evitar contagios.
México no es la excepción. Aunque las clases, ni las actividades al aire libre han sido canceladas en su totalidad, todo indica que ello ocurrirá pronto. En caso de que así sea, tendremos que llenar nuestra despensa con víveres para, al menos, dos semanas.
Sin que te espantes, solo para que estés precavido y listo, deberías echarle un ojo a esta lista de alimentos que te proponemos comprar, así como recomendaciones que te sugerimos poner en práctica, en caso de que la contingencia se instale pronto.
Alimentos enlatados
Lo mismo compra atún en agua o en aceite, que latas con verduras conservadas. Hay lugares donde ya venden pollo enlatado, así como encurtidos diversos.
Evita una intoxicación
Sobre el punto pasado es importante que tomes en cuenta ciertas precauciones. La comida que viene en lata es segura por sí misma, pero darle un mal manejo podría ser peligroso.
Regla de oro: no dejes que el contenido se quede en la lata por más de cuatro horas. De preferencia, apenas la abras tienes que vaciar el contenido en otro recipiente. Así te asegurarás que ninguna bacteria haga de las suyas con tu comida o, eventualmente, hasta contigo.
Preparaciones crujientes de harina
Aquí entran lo mismo galletas, que panes o pitas. Recuerda que, mientras más integrales sean, mucho mejor. Otra cosa que te recomendamos es que los empaques en bolsas resellables, dentro de las que sea difícil que se echen a perder o adquieran una consistencia blanda.
Usa el mínimo de sal
No solo por tu salud en general, sino porque la sal suele hacer que consumas mucha más comida y más agua de lo habitual. De lo que se trata en una situación como ésta, es de optimizar tus recursos de forma sana para todos.
Polvos para preparar bebidas
Esto es muy práctico. Te recomendamos comprar una cantidad suficiente de leche en polvo, así como de concentrados en la misma presentación, para hacer bebidas. La gran ventaja de esto, claro, es que no hay forma de que se descompongan, y solo necesitarás agua para poder consumirlos. Encima, te ahorrarás tener almacenadas tantas botellas.
Hazte a la idea de que no comerás banquetes todos los días
Como en cualquier situación de emergencia, la supervivencia es siempre lo más importante. Acostúmbrate a la idea de que todo puede pasar y que, por ejemplo, podrías no tener acceso al gas y tendrías que comer cosas frías, o que si amas mucho los vegetales y frutas frescas, tendrás que apartarte de ellas por un tiempo.
Mantequillas y aceites
Compra distintos tipos de ellos. La mantequilla, por ejemplo, te recomendamos que la adquieras en su presentación clásica, pero también la de cacahuate. Siempre te puede sacar de apuros. En cuanto a los aceites, consigue uno de canola para cocinar o freír, y uno de oliva o de ajonjolí para poner sobre ensaladas.
Cereal y barritas de cereales
Al cereal, igual que a las galletas de harina, te recomendamos mantenerlo sellado perfectamente, para que no pierda sus cualidades. Las barritas, especialmente si tienes niños en casa, que sean en porciones individuales. La gran ventaja de estos alimentos es que son muy energéticos.
Pescados y carnes que puedas congelar
Nunca será lo mismo consumir una carne fresca, que una que ha estado en refrigeración. Pero en este caso, lo importante es estar bien alimentado y variar lo que ingieres. Pasada la pandemia, podrás volver a la normalidad. Recuerda que una carne roja bien congelada puede tener una duración en buen estado, hasta de seis meses. Cuando se trata de pescado, la vida útil, incluso refrigerado, es de unos tres meses.
Mucha, mucha agua
Esto es cardinal. Cuando salgas a hacer estas compras, procura traerte toda el agua que puedas. En el caso de que la cuarentena se instalara pronto, trata de racionar el agua que consumes y haz que todos tengan consciencia de que tienen que cuidarla para que les dure.
Cuida las dietas
No todos comemos igual, lo mismo por gusto, que por necesidad. Si sigues una dieta muy específica, o alguien de tu familia, prevé eso y compra lo que cubra sus necesidades. Aplica lo mismo para la adquisición de vitaminas, suplementos o medicinas.
Fuentes: Kidney | Healthy Children