La pizza blanca es una de mis favoritas tanto por el sabor como por el hecho de que no tolero mucho el jitomate cocido, siempre me cae un poco mal por lo ácido de éste. Casi siempre trato de hacer alguna pizza blanca con ingredientes diferentes que puedan combinarse en algo interesante a la hora de la comida.
Hoy les traigo esta receta de una pizza blanca de pollo que es súper fácil de hacer y más aún si usas una masa para pizza ya hecha o tienes una lista en tu congelador. Si no tienes ninguna de las anteriores, por acá encontrarás la receta de la masa para pizza.
Vamos a los ingredientes
Ingredientes
250g de masa para pizza, 150g de pechuga de pollo, medio pimiento verde, un cuarto de cebolla blanca, unas ramitas de perejil, 120g de queso mozzarella o panela, 100ml de crema ácida, sal y pimienta negra molida.
Preparación
Primero vamos a extender la masa sobre una charola para horno o molde para pizza previamente recubierto de papel de cocción. Pongan a hervir la pechuga en agua con sal por unos 25 minutos aproximadamente o hasta que esté bien cocida. Déjenla enfriar y deshebrenla. Reservar.
Ahora van a cortar el pimiento en julianas y van a picar también finamente la cebolla y el perejil previamente enjuagado. Coloquen la crema sobre la masa de pizza seguida de la cebolla picada y el pimiento. Van a poner todo el pollo deshebrado sobre la pizza y sazonan con sal y pimienta.
Van a cortar el queso mozzarella o panela en rodajas y lo colocan sobre la pizza. Finalmente van a esparcir el perejil picado y lo colocan en su horno 180ºC por unos 20 o 25 minutos.
Degustación
La pizza blanca de pollo se come caliente y la puedes acompañar con una ensalada de berros o una lechuga clásica. Para beber te recomiendo un vino blanco seco o una cerveza clara de tipo Pills.
Tiempo de elaboración | 40 minutos
Dificultad | Fácil
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