El flan de leche condensada es una de las estrellas de la mesa de postres de la cena de Navidad. Existen diversas recetas, como el flan de dulce de leche o incluso el flan de tapioca, pero si eres de los que prefieren lo simple, fácil y rápido, esta es la receta perfecta. Para no quedarte solo con el antojo, corre y prepara esta delicia en casa. ¡Es tan fácil que cualquiera puede hacerla! Además, sorprenderás a tus amigos y familiares con su delicioso sabor.
Para que el caramelo de tu flan de leche condensada quede perfecto, respeta siempre la proporción de media medida de agua por una medida completa de azúcar. Es decir, la cantidad de agua debe ser siempre la mitad de la de azúcar. Si quieres más caramelo, usa 2 tazas (té) de azúcar por 1 taza de agua. ¿Ves qué fácil es?
Rompe los huevos en la licuadora y mézclalos bien.
Agrega la leche condensada y la leche, y bate nuevamente.
Para preparar el caramelo, derrite el azúcar en una cacerola a fuego lento hasta que tome un color ligeramente oscuro.
Añade el agua a la cacerola y deja que espese.
Coloca este caramelo en un molde redondo y vierte la mezcla del flan encima.
Hornea durante 45 minutos a una temperatura de 150 °C.
Pasado ese tiempo, inserta un tenedor para comprobar si está bien cocido.
Deja enfriar y desmolda.
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