¿Necesitas hojas de albahaca para tu ensalada? Simplemente puedes recolectarlas directamente de tu planta en maceta. Eso sí, ten cuidado, debes de saber cómo hacerlo porque podrías correr el riesgo de matar tu planta, y para que eso no suceda: estas son las reglas a seguir para cortar correctamente la albahaca.
La albahaca es una hierba aromática clave para la temporada de verano. Aporta frescura y sabor a muchos platillos deliciosos, entre los que destacan: nuestra mozzarella de tomate, ensaladas de pasta, cócteles o pasta al pesto. Para tenerla siempre a mano, muchas personas optan por tener en casa la versión en maceta en lugar de comprarla cortada. Esta solución te permite ahorrar dinero, siempre que tengas un poco de habilidad para la jardinería y que, desde luego, la cuides bien.
¿Sabías, por ejemplo, que puedes multiplicar fácilmente tus plantas para duplicar tu producción? La recolección también debe hacerse correctamente, de lo contrario, tu planta morirá.
Las tres reglas de oro para cortar bien la albahaca
1. Tener una planta lo suficientemente grande
Para empezar a recolectar las hojas, lo mejor es esperar a que tu planta alcance una altura de 15 a 20 cm. No dudes en medirla para determinar si está lista para ser recogida. También asegúrate de que los tallos no superen los 20 cm.
2. Evita cortarla por la tarde
Puedes cosechar la albahaca en cualquier momento del día, pero se recomienda hacerlo antes del mediodía para conservar su frescura. Luego guárdala en el refrigerador por unos días envuelta en una toalla de papel.
3. Cosecha con moderación
Cuando necesites hojas de albahaca para cocinar, recógelas en pequeñas cantidades. Elije hojas de diferentes lugares de la planta sin cortar los tallos. Este método anima a la planta a producir más hojas. Si necesitas muchas hojas a la vez, por ejemplo para hacer pesto, es mejor tener varias macetas y sacar un poco de cada una.
¿Qué hojas elegir?
Cuando coseches las hojas de albahaca, asegúrate de cortar al nivel del tallo sin dañarlo. Puedes usar unas tijeras pequeñas o pellizcarlas con tus uñas. Asegúrate de cortar siempre los tallos desde arriba hacia abajo, teniendo cuidado de no quitar más de un tercio de la altura total de la planta. Esto preserva las hojas en crecimiento por debajo.
Es importante conservar las hojas grandes que se encuentran en la parte inferior de los tallos, ya que juegan un papel crucial. Almacenan el calor del sol y proporcionan la energía necesaria para el crecimiento de la planta. Asegúrate de conservar al menos dos pares de estas hojas grandes
En Directo al Paladar también puedes leer| Comer albahaca beneficia tu salud, mira cómo| Cómo cultivar hierbas aromáticas en casa| Tarta de tomate y albahaca receta