Para el próximo fin de semana deja descansar las carnes asadas, y mejor prepara unas hamburguesas, hoy te enseñamos cómo preparar carne para hamburguesa con carne molida de pollo y de paso te damos trucos para sazonarla.
La carne de pollo es bastante gentil para preparar seca o en guisado, pero en hamburguesas también logra tener un buen sazón y quedan bastante jugosas cuando aplicas los trucos que te compartimos.
Trucos para que la carne quede súper jugosa
Primero que nada (pero irónicamente es el último paso) es no olvidar presionar el centro de la hamburguesa para que no se deforme y encoja más de lo esperado.
Deja reposar la carne condimentada 30 minutos en el refrigerador para que los sabores se concentren.
Para compactar la carne de tu hamburguesa no olvides agregarle huevo o algún agente como concentrado de linaza.
El pan molido también ayuda a nivelar el nivel de humedad que el huevo le puede aportar, incluso la verdura.
Agrega un toque de tocino, pero no las tiras sobre la carne de hamburguesa, más bien pícalo finamente para agregarlo a la carne molida.
El truco más importante es cocinar la carne tapada para que conserve sus jugos.
Mezcla la carne de pollo con 1/2 cucharada de aceite de oliva, el perejil, los huevos, el ajo, sal, pimienta, paprika y la mostaza. Opcionalmente puedes agregar unas gotas de limón.
Poco a poco ve agregando el pan molido para equilibrar la cantidad de humedad. Sabrás que la carne está lista cuando esté maleable y no se pegue en tus manos.
Deja reposar la carne 30 minutos en el refrigerador antes de formar las bolitas. Aplástalas ligeramente o dales forma con la mano.
Vierte un chorrito de aceite al sartén y cuando esté bien caliente agrega la carne y tápala para evitar que pierda su jugosidad. Voltea y retira una vez que esté bien cocido.
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