Ahora que estamos iniciando un nuevo año, muchas personas incluyen en sus propósitos, bajar de peso. Pero muchas veces no evalúan todo lo que se requiere para lograrlo al cien por ciento. El mejor plan para perder peso es aquel que las personas pueden mantener a largo plazo. Muchas personas, motivadas principalmente por un deseo de mejorar la salud, pueden seguir planes de alimentación, como Keto o Paleo, al pie de la letra. Sin embargo, otras personas son incapaces de mantener el más mínimo cambio ¿Por qué pasa esto? ¿Cuál es la diferencia?
Existen muchos factores que pueden influir la adherencia a una dieta, principalmente están relacionados con la psicología, los hábitos y el comportamiento de cada persona. Es importante que antes de iniciar una dieta, consideres varios puntos básicos para que tus metas se cumplan y no te frustres en el intento.
Antes de ponerte una meta alimentaria, evalúa tu disposición a cambiar. Si tu motivación para bajar de peso es baja, no tienes apoyo familiar o social, o tu visión sobre la dieta es negativa, entonces será muy difícil que llegues a la meta. Es mejor que aplaces el propósito, y lo empieces cuando realmente estés motivado.
Analiza si la dieta es flexible. Aunque es cierto que la dieta debe de tener objetivos claros (bajar 10 kilos), es importante que se centre en cambios graduales (nada de dietas milagrosas de 8 días), sea sencilla, y que se adapte a tus preferencias. La baja adherencia a una dieta se asocia con planes inflexibles y que tienen puntos de vista negativos o extremadamente restrictivos.
Cuando empieces tu dieta, fíjate que tus objetivos sean ‘SMART’, es decir, deben de ser específicos, medibles, alcanzables, relevantes y con un tiempo específico. Lo mejor es que los primeros objetivos sean pequeños y fácilmente alcanzables, enfocados en añadir un nuevo comportamiento, en lugar de quitar un comportamiento antiguo. Un objetivo SMART puede ser comer frutas y/o verduras en cada comida la próxima semana.
Antes de empezar la dieta, has una lista de los factores que crees harán los cambios nutricionales más fáciles (comer en casa), y otra lista con los factores que los harán más difíciles (muchos viajes por trabajo). Esto te ayudara a identificar puntos de apoyo, a estar preparado para los tiempos difíciles, y a superar más fácil las barreras que te topes en el camino.
Varios estudios han demostrado que el éxito para adherirse a una dieta es saber cocinar y contar con recetas saludables que cumplan con los principios básicos de la dieta a seguir. Así que, si no sabes cocinar, antes de ponerte a dieta, aprende algunos conceptos básicos, incluso puedes ir a clases de cocina. Después recopila recetas saludables para que tengas a la mano (puedes encontrar muchas recetas en Directo al Paladar México).
Contar con un apoyo social es crítico para la salud en general; y también juega un papel súper importante para mantener un cambio de comportamiento. Antes de empezar una dieta, asegúrate de obtener apoyo de amigos, familiares o compañeros de trabajo. Puedes unirte a grupos sociales para que entre todos se motiven, actualmente existen muchas herramientas en internet y en aplicaciones móviles.
¡Éxito!