Una pasta, rica, rápida, del gusto de todos y nutritiva, que acompañada de una ensalada, nos brinda una comida completa. ¿Para que complicarnos al querer ofrecer un platillo de lujo? Esta pasta queda deliciosa, si la presentamos lindo, es ¡un plato de lujo! Sofía Loren dice que toda su vida a comido pastas, y ¡miren qué mujer! Mamá la conoce muy bien, no tengamos miedo a las pastas.
Ingredientes
Un paquete de 500 grs. de pasta penne de buena marca. I cucharada de sal de mar. 100 grs. de queso parmesano, 100 grs. de queso monterrey, queso gouda o edam, 1 queso queso cremoso de mediano tamaño, 500 mil. de leche, una cucharadita de sal de mar, y pizca de pimienta blanca, 1 oz. de vino blanco y unas hojas de albahaca fresca.
Procedimiento
Poner la leche en una olla y llevar al fuego junto con las dos hojas de albahaca,y la sal. Poner una olla al fuego con una cucharada de sal gruesa, unos 4 litros de agua, al romper el hervor, agregar 500 grs. de pasta penne. Cocer según el paquete o aproximadamente 12 minutos. En tanto cortar los quesos en pequeños trozos. Agregar los quesos a la leche y dejar hasta que se fundan. Mover ocasionalmente. Si es necesario, poner al fuego otro poco o de plano, procesarlos con todo y hojitas de albahaca. (Mi parmesano estaba ya muy duro y tuve que hacer esto último).
Apagar y retirar del fuego. Agregar un poco de pimienta blanca recién molida, y solo un toque de máximo una onza de vino blanco. Revolver muy bien y en tanto, refrescar la pasta con un poco de agua fría, colar y poner en una fuente o refractario. Bañar con la salsa de quesos y espolvorear más parmesano rallado. Servir de inmediato, o poner en horno unos minutos para que se gratine un poco.
Escurrir la pasta en cuanto esté cocida pero firme (Al dente) en un colador grande y refrescar ligeramente con agua limpia escurriendo todo exceso. Poner en una fuente de servir y bañar con la salsa caliente de quesos. Poner suficiente tocino dorado, o permitir que cada quien se ponga a su gusto.
Agregar más queso parmesano rallado al momento y decorar con toque de pimienta y hojitas de albahaca. Servir muy caliente con una pequeña ensalada fresca de lechugas con aceitunas negras y jitomates cereza acompañada de una vinagreta al ajo con toque de chile seco picante y más parmesano.
Sugerencia: Esta pasta puede comerse con tocino de soya para hacer un plato lactovegetariano ideal para quienes que no consumen carnes. Y como siempre, les dejo en Directo al Paladar el enlace a una deliciosa receta para acompañar esta pasta: Ensalada César a mi manera ambos platillos quedan muy bien con un refrescante vino blanco o rosado, por su intenso sabor, diría que incluso con un tinto joven.
