Las brochetas siempre son una manera muy original y diferente de comer alguna carne roja o blanca. Así mismo las puedes preparar para pescados y mariscos con la seguridad de que el resultado será interesante. Si solemos ligar las brochetas con un asador en el jardín, podemos perfectamente bien también hacerlas en la cocina con un sartén o un comal.
Hoy les propongo esta receta de unas deliciosas koftas de pollo que son ideales para una comida con tintes orientales o para picar a la hora de la botana. Estas brochetas son de origen oriental, de Líbano para ser más específicos. Las podemos encontrar en muchos países medio orientales así como en restaurantes del mismo estilo.
Ingredientes para dos personas
- 2 pechugas de pollo, 1 huevo, 1/4 de cebolla, 1/2 taza de pan molido, 2 cucharadas de cilantro picado, 1 cucharada de aceite de oliva, 1 cucharita de ajo en polvo, 1 cucharita de curry en polvo, sal y pimienta negra molida.
Cómo hacer unas koftas de pollo
Para hacer esta receta vamos a tener que retirarle la piel a las pechugas así como limpiarlas de todo tipo de grasa. Cuando estén listas las molemos en un procesador de alimentos o en la licuadora. El molido tiene que ser lo más fino posible para que no tengamos trozos de pollo que queden. Colocamos el pollo molido en un cuenco y lo sazonamos con el ajo en polvo, el curry, sal y pimienta. Picamos finamente la cebolla así como el cilantro. Los integramos al pollo molido y añadimos finalmente el huevo y el pan molido.
Cuando todo quedé bien mezclado formamos unas bolas, como unas albóndigas, de unos cinco centímetros de diámetro aproximadamente. Ponemos una bola en cada palillo de madera y con las mano les damos una forma alargada como si fuéramos a hacer una salchicha. Calentamos en aceite en un comal o sartén y asamos las brochetas a fuego lento por unos 25 minutos aproximadamente.
Tiempo de elaboración | 40 minutos
Dificultad | Fácil
Degustación
Te recomiendo servir estas deliciosas brochetas kofta de pollo calientes junto con una sémola de trigo o un arroz integral. Así mismo puedes ofrecerlas como una botana llena de sabor junto con un aderezo o con una salsa de soya a dulce. Lo mejor es comerlas recién hechas y si las vas a recalentar será mejor hacerlo en el sartén con unas gotas de aceite.
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