La Rosca de Reyes o Roscón de Reyes es un clásico en la primera semana de enero, y la primera celebración que tenemos iniciando el año. Todo el mundo adora la clásica receta de rosca con ate, frutos secos y acitrón; pero como buenos mexicanos siempre nos gusta innovar con los sabores: desde el pan de muerto relleno de chilaquiles hasta las roscas de reyes hechas con tacos al pastor o tamales. En esta ocasión, apelaremos a nuestros gustos dulces y paladares amantes de la combinación de los frutos rojos y el queso con esta Rosca de Reyes rellena de mermelada y queso crema.
Esta receta es perfecta para principiantes y para todos aquellos que tienen muchas ganas de sorprender a su familia con algo nuevo, esponjoso ¡y muy delicioso!
Comenzamos precalentando el horno a 180°C.
Por otro lado en un tazón pequeño vamos a activar la levadura con 1 cucharadita de azúcar y el agua tibia. Revolvemos y dejamos reposar para que doble su volumen.
En un bowl amplio o una superficie limpia formamos una fuente con la harina cernida y 3/4 de taza de azúcar. En el centro abrimos el huevo y las yemas, junto con la mantequilla, la leche evaporada y el chorrito de vainilla.
Mezclamos todos los ingredientes hacia adentro de manera envolvente para formar la masa. Amasamos y golpéala contra la mesa hasta que quede tersa, elástica y no se te pegue a los dedos. Forma una bola y colócala en una fuente engrasada, engrasa también la superficie de la masa con un poco de aceite vegetal y cubre con un papel plástico film. Déjala reposar al menos 20 minutos hasta que doble su volumen.
Para la cobertura
- Mientras la masa reposa, vamos a batir media taza de mantequilla con la azúcar glass y la leche condensada hasta que se integre. Añade 2 tazas de harina con un poco de polvo para hornear y bate hasta integrar. Cubre con el plástico film y refrigera 15 minutos.
Para formar la rosca:
Coloca la masa sobre una superficie previamente enharinada y estira con ayuda de un rodillo hasta formar un rectángulo, rellena con las tiras de queso y la mermelada. Enrolla hacia el centro y si está muy grande puedes cortar a la mitad para formar dos roscas. Une los bordes para formar el círculo.
Añade un poco de aceite a la superficie y cubre con plástico. Dejamos reposar en un lugar tibio hasta que doble su volumen.
Una vez que haya pasado el tiempo, barnizamos con huevo la rosca.
Por otro lado, extenderemos la pasta dulce sobre una superficie enharinada. Cortamos en tiras gruesas y disponemos por encima de la rosca.
Horneamos a 180°C por 35 minutos.
Dejamos enfríar y decoramos con crema batida y acomodamos los frutos rojos a tu gusto. ¡A disfrutar!
Foto de portada retomada de Bakers