¿Se te antoja un postre fácil de hacer, rápido, que no requiera mucha elaboración? Esta es la receta ideal que estabas buscando y que no puedes dejar pasar para preparar y consentirte. Este flan de almendras es supercremoso, necesita 5 ingredientes y todos ya los tienes en el refri.
Esta receta te puede caer como anillo al dedo si te animaste a preparar tus leches o bebidas vegetales como la leche de almendras, porque si te sobra leche o quieres aprovechar los restos de la almendra, es perfecta. Los otros 4 ingredientes ya los tienes ahí.
Consejos para preparar el flan de almendras
Para un flan más cremoso, utiliza leche de almendra en lugar de la leche de vaca.
Si utilizas leche de vaca, agrega almendras molidas a la leche para agregar consistencia y sabor.
Si quieres un flan más dulce, puedes agregar más leche condensada a la mezcla.
Revisa que la grenetina esté completamente disuelta antes de agregarla a la mezcla de flan.
Este flan también se puede preparar con otros tipos de frutos secos como nuez de la india, nuez pecana, pistache y lo que más te guste.
Si no tienes caramelo líquido, puedes prepararlo en casa calentando azúcar en una sartén hasta que se derrita y se caramelice.
Deja que el flan se refrigere durante al menos 4 horas, o preferiblemente toda la noche. Esto permitirá que la gelatina cuaje bien y el flan alcance la consistencia deseada.
Con qué servir el flan de almendra
Helado de canela
Helado de vainilla
Crema batida
Yogurt griego cremoso
Almendras picadas
Trozos de galleta de canela
Frutos rojos frescos o congelados
Caramelo de chocolate
Chocolate rallado
Calienta a fuego medio bajo la leche de almendras, dos cucharadas de azúcar y la esencia de vainilla. Añade la almendra triturada para darle textura y sabor al flan.
Hidrata la grenetina en cuatro cucharadas de agua tibia por cada cucharada de grenetina. Mezcla un poco para deshacer grumos y cuando esté bien hidratada vierte en la leche caliente. Disuélvela y continúa moviendo por 10 minutos.
Una vez bien disuelto y la mezcla bien caliente (no debe de hervir) retira del fuego y vierte en tu molde favorito.
Deja enfriar y refrigera hasta que cuaje mientras haces el caramelo clásico del flan.
En un sartén bien caliente, vierte dos cucharadas de azúcar y deja calentar a fuego medio sin dejar de mover para que no se queme. Una vez que tiene un color dorado, retira y vierte sobre el flan.
Imagen obtenida de Alp Aksoy vía Flickr
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