Cuando comemos el delicioso pan de muerto, que por cierto se vende ya desde septiembre, pocos pensamos en su historia, pero seguramente a todos nos parece curiosa su forma y entendemos algo sobre ella y el significado de sus "protuberacias", Vamos a conocer más de este pan tradicional mexicano.
Algunas personas, no sé si historiadores propiamente, creen que este pan se hacía para ofrecer a Izcoxauhuqui, Huehuetéotl y Cuetzaltzin, en un rito que hacían los primeros pobladores de Mesoamérica, en donde enterraban a sus muertos con sus pertenencias y una especie de pan hecho con amaranto molido, mezclado con la sangre de los sacrificados en honor de estos Dioses y que se repartía a los pobladores para "dar a comer divinidad".
Esta es una de tantas hipótesis sobre el surgimiento del pan de muertos, porque igual se dice, que los evangelizadores al ver los ritos sangrientos que se realizaban en donde se comían el corazón de las víctimas, generalmente doncellas, comenzó a elaborarse un pan que simbolizaba el corazón y la sangre con figuras de harina y azúcar coloreada de rojo sobre este, de esta forma, satisfacían el deseo de "comer" la muerte para desafiarla o burlarse de ella, aunque quizá era una señal de respeto y unión entre muertos y vivos, algo así como "crear" el último vínculo perdurable. (Algo que en el catolicismo es la "comunión", más o menos).
De Huitzilopozchtli, también se dice que se elaboraban figuritas de amaranto, a las que se les clavaba un objeto filoso para "extraerles" el corazón del ídolo, lo que repartían de igual forma y así "compartían" su divinidad.
Algo en lo que todos coincidimos, es que, en el más conocido, (el redondo), la bola que se coloca encima, simboliza un cráneo, las figuritas alargadas en forma de lágrima, que se "pegan" de arriba a los lados, como escurriendo, significan, los cuatro rumbos para englobar al nahuolli: (Universo), o los cuatro puntos cardinales que también pueden ser los cuatro dioses o divinidades: Quetzalcóatl o Camaxtli, Tláloc o Huitzilopochtli, Tezcaltlipoca y Xicotepet. Algunos les llaman "canillas" y también simbolizan los huesos, la esencia de azahar, que se utiliza en algunas variedades, es para recordar a los ya fallecidos.
Sin embargo, que no todos tienen esta forma: se hacen panes con figura humana, o Antropomorfos, con figuras de animales, o sea zoomorfos, principalmente en las zonas de Iguala de Telolapan, Mixquic y Tepotlán; panes fitomorfos, que se elaboran representando flores, áboles etc. y por último, los mitomorfos, que pueden ser de la figura que sea, sin que se identifique con los anteriores, y que suelen representar a seres fantásticos.
Ya tienen una idea de lo antiguo e importante para muchas culturas que es el pan de muerto, como las ofrendas que se colocan en los altares que afortunadamente muchas personas siguen elaborando en sus casas, en escuelas, oficinas, áreas públicas etc. Fomentándose con concursos que además de hermosos y coloridos, reviven nuestras tradiciones.
Hoy día, estos panes se elaboran con rellenos diversos como natas, cajeta, chocolate, natillas, frutas secas, quesos o mermeladas, se encuentran con espolvoreados con amaranto (Uno de los más tradicionales), untados de mantequilla y bañados con azúcar, con ajonjolí, y se pueden comprar en prácticamente toda la República, pero más en la zona centro y sur, que los rituales son más grandes involucrando a toda la comunidad y que hoy atraen a multitud de turistas.
Las formas, tienen su origen en las costumbres y creencias de las diferentes regiones de donde provienen mayormente, del gusto y simbolismo que cada persona desea dar a su pan, y de la creatividad popular que no deja de demostrar que sigue viva y que asombra y divierte a muchas personas con su ingenio y ocurrencias.
¿Quien gusta de uno de estos deliciosos panes? Yo, ¡por supuesto! y lo quiero tradicional, o sea; sin rellenos. Espero elaborar uno o varios con recetas de lugares que rinden culto a sus muertos de forma preciosa, y que tengo entre mis planes visitar por estas fechas para traerles la crónica. Les dejo un par de recetas que tomé de la red y que me parecieron interesantes.
Mi receta se las debo, recién llego de un viaje de dos semanas. Disfruten la convivencia con nuestros seres queridos ya fallecidos, o los que vengan a acompañarnos... del más allá. Y si gustan leer más sobre cada región del País y la forma de sus panes, entre otros datos que me encantaron, les dejo este enlace:
El pan de muerto en las regiones de México
Y mi fuente: