Después de la comida siempre nos tomamos un tiempo para hacer la digestión cómodamente, y la verdad depende mucho de cada persona lo que le sirve; algunos usan té, café o alimentos fermentados. Hoy te vamos a responder si la comida fermentada es buena o mala para la digestión, esto dicen los expertos.
Probablemente no es lo que estás pensando sobre la comida fermentada; no es comida a punto de echarse a perder. Nos referimos a ingredientes como el kéfir, kimchi, chucrut y kombucha. Hoy te contamos los motivos por los que son buenos consumirlos.
¿Qué son los alimentos fermentados?
La fermentación es un proceso natural por el cual los microorganismos de la levadura y las bacterias convierten el almidón y el azúcar en alcohol o ácidos. Estos últimos funcionan como un conservador natural y le dan a los alimentos una textura y acidez distinta al sabor original.
La ventaja de los alimentos fermentados es que promueve el crecimiento de bacterias buenas conocidas como probióticos, los cuales, han demostrado que mejoran la función inmune, la salud digestiva y cardiaca.
Beneficios de los alimentos fermentados para la salud
Facilita la digestión de los alimentos: la fermentación ayuda a descomponer los nutrientes de los alimentos, haciéndolos más fáciles de digerir. Además, la fermentación ayuda a descomponer y destruir los antinutrientes, como los fitatos y las lectinas, que son compuestos que se encuentran en semillas, nueces, granos y legumbres que interfieren con la absorción de nutrientes. Por lo tanto, el consumo de frijoles fermentados o legumbres como el tempeh aumenta la absorción de nutrientes beneficiosos, haciéndolos más nutritivos que las alternativas no fermentadas.
Mejora la salud digestiva: los probióticos que producen la fermentación ayudan a equilibrar las bacterias amigables en el intestino y benefician los problemas digestivos. Los probióticos pueden ayudar a reducir los síntomas del síndrome de intestino irritable. Un estudio de 6 semanas en 274 adultos con SII encontró que el consumo diario de 4,4 onzas (125 gramos) de leche fermentada similar al yogur mejoró los síntomas del SII, incluida la hinchazón y la frecuencia de las heces.
Aumenta tu sistema inmunológico: debido a su alto contenido de probióticos, los alimentos fermentados pueden dar un impulso a su sistema inmunológico y reducir su riesgo de infecciones como la gripa, también puede ayudarte a recuperarte más rápido cuando estás enfermo. Además, muchos alimentos fermentados son ricos en vitamina C, hierro y zinc, todo lo cual ha demostrado que contribuye a un sistema inmunológico más fuerte.
Salud mental: algunos estudios han relacionado las cepas probióticas Lactobacillus helveticus y Bifidobacterium longum con una reducción de los síntomas de ansiedad y depresión. Ambos probióticos se encuentran en alimentos fermentados.
Salud del corazón: los alimentos fermentados se han asociado con un menor riesgo de enfermedades cardíacas. Los probióticos también pueden reducir modestamente la presión arterial y ayudar a reducir el colesterol LDL total y "malo".
Recuerda que lo publicado en Directo al Paladar México no reemplaza la opinión de un profesional de la salud. Acude a un médico certificado ante cualquier síntoma o duda sobre tu salud.
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