Ya hablamos de la importancia de la fruta en porciones pequeñas por su alto contenido de azúcares, ya hablamos de las oleaginosas tales como los cacahuates, nueces, almendras, castañas, piñones, macadamia y avellanas, y las precauciones para darles a los ancianos sin riesgos de ahogo, ya hablamos de las leguminosas y sus propiedades y variedades, lo importante que son para quienes ya no pueden comer carne de todo tipo, hoy vamos a tratar del tema de las proteínas en la dieta del adulto mayor.
Tenga la edad que tenga el ser humano, simplemente no puede vivir sin proteínas, so riesgo de que su organismo empiece a devorarlo literalmente. ¿Suena a ficción? Cuando una persona, no ingiere proteínas del origen que gusten y prefieran, el resultado será un cuerpo caquéxico en el que desaparece todo rastro de músculo y grasa hasta sobrevenir la muerte.
De ahí la importancia de incluir cada día de menos una vez, una porción de una fuente adecuada de proteína. Estas pueden venir de animales o vegetales, y en estas a su vez, existen muchas alternativas simples y sencillas para que el anciano pueda comer sin problemas de masticación, como resultaría si pretendemos que coma carne en trozo, y sobre todo, cortes algo duros o secos.
Proteínas de origen animal
Todo tipo de carnes blancas y rojas, y sus derivados como los embutidos, mariscos, insectos tales como chapulines, gusanos de maguey, escamoles, chinicuiles, jumiles, etc. fuente de proteína de la más alta calidad. Los productos animales tales como: huevo de gallina, pata, codorniz, guajolote etc. Quesos y en general derivados de la leche.
Proteínas de origen vegetal
Mencionamos en la parte dos de este tema y en la tercera, los más importantes: oleaginosas, como son: avellanas, piñones, cacahuates, almendras, nueces de cualquier variedad, macadamia etc. y las leguminosas, como son: lentejas, habas, habas, chícharos, frijoles, garbanzos, y todo tipo de legumbre envuelta en una vaina, además de los cereales como: trigo, cebada, tapioca, quinoa, amaranto, centeno etc. que aunque contienen más carbohidratos que proteínas, son un excelente alimento mientras más enteros y sin refinar lleguen a nuestra mesa.
El adulto mayor, muchas veces requiere que sus alimentos se les ofrezcan picados, molidos y suaves, porque su dentadura, suele carecer de piezas importantes, o ya no tienen piezas naturales y sí, puentes y placas, que por muy buen trabajo que sean, presentan inconvenientes que van provocando que se los quiten para limpiarlos, para despegar lo que se queda adherido y que molesta como la piedra en el zapato, lo que conlleva muchas veces a que por accidente, tiren el trabajo dental tan caro, a la basura sin que nos demos cuenta.
Por esta razón se sugiere que se les ofrezca pescados, que son de carne suave, con la advertencia de que deben estar completamente libres de espinas, que parece obvio, pero que a veces puede parecernos que están bien de todas sus facultades y les permitimos comer un pescado entero dorado y apetitoso, con el riesgo de que no vean la espina que a nosotros nos parece más que obvia. Por lo mismo, preparen o compren filetes, o hagan croquetas. Reitero: piensen en los adultos mayores como en niños y a más edad, más parecen bebés grandes y como tales deben ser atendidos.
Las proteínas no necesitan darse en porciones grandes, 80 grs. de proteína de buena calidad dos veces al día es suficiente para la mayoría de los adultos que no llevan una vida muy activa. Si preparamos platos sencillos para que puedan comerlos como lo son unas tortitas o unas croquetas y acompañamos de una ensalada fresca, seguramente conseguiremos que coman sin problemas.
Los quesos deben ofrecerse con cautela, porque si bien son excelentes fuentes de proteína, causan estreñimiento si se comen frecuentemente o como única opción a las carnes. Si no es este problema , un plato de quesos, o un queso en alguna salsa sabrosa, es una opción muy bien recibida.
Los caldos, pucheros, consomés, el mole de olla etc. son platillos muy completos que reconfortan, amén de que se congelan muy bien una vez colados y clarificados, y las verduras y carnes se pueden preparar de muy variadas formas, sobre todo si no se les deja muy recocidas, y si hace frío, son una forma maravillosa de hacer que nuestros ancianos entren en calor.
Las sopas de mariscos, o las que incluyen alguna de las fuentes de proteínas que les he citado, son deliciosas y también bien recibidas, los arroces, se enriquecen igual que los fideos, con nueces y almendras, solo recuerden que los frutos secos son duros y pueden atorarse en la garganta, tengan a mano un plátano muy maduro, para que en caso de ahogo, den plátano, que arrastrará el fruto seco.
Recuerden que los adultos mayores, van perdiendo las papilas gustativas, esta afección se llama: hipogeausia. Así que condimenten sus platillos un poco más para que les sepan realmente deliciosos, y una buena sugerencia para realzarlos, es utilizar intensificadores de sabor. En Directo al Paladar, les dejo los enlaces anteriores de estos post especiales para el adulto mayor. Primera parte, segunda parte y cuando termine este borrador, ya estará la tercera parte sobre las leguminosas.
+
