El tajine es un instrumento de cerámica que se usa en la cocina marroquí, y en muchos otros tipos de cocina árabe, para cocinar alimentos. Los platillos que también se preparan dentro de este utensilio, también se denominan tajine. Una de las principales cualidades del tajine es que su forma cónica permite que los alimentos mantengan su jugo gracias a que la humedad se concentra en su interior durante la cocción.
Esta cualidad de cocimiento se puede replicar de una forma bastante similar utilizando una olla de cocción lenta. La receta que hoy les comparto es para preparar un delicioso tajine de pollo acompañado de varias especias como comino, jengibre, canela, cúrcuma, clavo, entre otras. Además, se agregan arándanos y chabacanos deshidratados para darle un toque agridulce bastante agradable al paladar.
En una sartén mediana calienta una cucharada de aceite de oliva y cocina el pollo durante 5-8 minutos hasta que este cocido por todos lados. Retira del fuego y reserva.
En la olla de cocción lenta mezcla el caldo de pollo, pasta de jitomate, jugo de limón, comino, cilantro molido, jengibre molido, canela, cúrcuma, clavo y pimentón. Sazona a tu gusto con sal y pimienta.
Añade el pollo cocido junto con la cebolla, zanahoria, arándanos y chabacanos. Mezcla bien. Tapa la olla de cocción lenta y programa velocidad alta durante 4 horas.
Con qué servir el tajine de pollo en olla de cocción lenta
El tajine de pollo en la olla de cocción lenta es un platillo con un sabor bastante predominante, así que te recomiendo acompañarlo de un arroz blanco o de un couscous sencillo. Para una experiencia marroquí completa, puedes servirlo acompañado de pan árabe recién salido del horno.
