¿Quién dijo que preparar una comida sabrosa implica pasar horas en la cocina? Hay días en los que no tenemos demasiado tiempo para andar preparando algún alimento muy elaborado, pero eso no tiene que significar que comamos algo aburrido. Esta receta de tostadas de carne molida son un must. Pueden parecer sumamente simples, pero cuando las pruebes se convertirán en tu receta de cajón para los días ajetreados.
Se trata de un exquisito platillo que se puede preparar de una forma muy fácil. Y aunque no lo parezca, es un alimento completísimo, que te va a llevar muy poco tiempo de preparación y que realmente te va a saciar. Si algo saben las mamás mexicanas, es que las recetas preparadas con carne molida tienen todo lo necesario para convertirse en las consentidas de la familia.
Esta receta se basa en las clásicas recetas de tostadas mexicanas, pero en una versión que complementa con elementos que la hacen sumamente saludable, nutritiva y sin una gota de grasa.
Calentamos una sartén a fuego medio con un chorrito de aceite vegetal y freímos el diente de ajo. En cuanto nuestro aceite quede infusionado con el ajo, ponemos a freír la cebolla, el jitomate y la carne molida, le agregamos un poco de agua, sal, la hoja de orégano y una pizca de comino. Si no tienes estas especias en casa, también puedes probar espolvoreando un poco de orégano. Reservamos en cuánto la carne esté bien cocida.
Untamos nuestros frijoles y una capa delgada de crema agria (o yogur natural, para hacerlo más saludable) sobre una tostada de maíz. Añadimos la carne molida y por encima ponemos una cama de lechuga.
Decoramos con unas cuantas rebanadas de aguacate y ya está más que lista para servir. Puedes acompañarla también con tu salsa favorita, nosotras tenemos un secreto: ponerles un poco de salsa botanera o esta salsa valentinacasera y sin conservadores. Quedan irresistibles.