Ya tenemos todo listo para celebrar este Día de la Candelaria; por un lado, ya preparamos las recetas de tamales (tanto salados como dulces), Guajolotas y hasta atoles para acompañar. Pero todavía falta una receta que nunca puede fallar para aquellas personas que no gustan tanto del atole y prefieren tomar sus tamales con una buena taza de chocolate caliente. Hay muchas formas de preparar chocolate caliente, desde el básico de la abuelita o con canela, pero he de confesar algo: mi favorito es el Oaxaqueño.
Quién ha tenido la dicha de probar un delicioso chocolate oaxaqueño en el mercado mientras chopea un poco de pan no sabe lo que es la verdadera felicidad. Si tú también mueres de ganas de tomarte una rica taza de chocolate oaxaqueño con un buen pan de dulce que te reconforte el corazón, te contamos como prepararlo en casa.
El origen del cacao, o el alimento de los dioses, se remonta al periodo Mesoamericano en el que diversas culturas prehispánicas descubrieron muchas bondades del árbol del cacao: con fines terapéuticos, como moneda, para rituales sagrados y como bebida, mezclada con especias.
Existen muchas formas de prepararlo, pero en esta ocasión te compartiremos la más rápida y sencilla: ideal para prepararla en alguna reunión familiar o simplemente porque traes mucho antojo por tomar una taza calentita de chocolate para acompañar tus tamalitos.
En definitiva nada se compara al sabor de preparar el chocolate desde cero, tostando y moliendo las semillas de cacao, pero como muchas personas no tenemos los instrumentos necesarios para hacerlo en casa, lo haremos de la forma más sencilla: con una barra de chocolate. En Oaxaca, el chocolate de mesa por excelencia es el Chocolate Mayordomo, tiene un sabor y una textura insuperable.
Comenzamos tostando en un sartén o comal mediano a fuego suave, sin dejar de mover, las almendras peladas. Una vez que queden doraditas las molemos junto con la bara de canela en un procesador de alimentos.
En un cazo u olla de barro ponemos a hervir la leche (puedes sustituirla simplemente por agua) y en cuanto comience a hervir disolvemos la barra de chocolate junto con la mezcla de almendras tostadas.
Batimos con un molinillo de madera para espumar. Y sirve caliente en tazas medianas. ¡A disfrutar y quitarnos el frío de una buena vez!
