Esta receta de papas hervidas a las hierbas es la forma más fácil de cocinar papas y no se tienen que pelar, ya que en la cáscara es en donde se guarda el mayor sabor y los minerales. Las papas nuevas son las mejores para hervir porque tienen una piel delicada y son muy cremosas y mantecosas en el centro. Estas papas son excelentes si las rocías con mantequilla derretida, aceite de oliva extra virgen y las espolvoreas con sal kosher y hierbas.
Las papas hervidas son una guarnición sabrosa y fácil de preparar que combina bien por ejemplo con un bistec a la sartén, mariscos como camarones empanizados o lomo de cerdo al horno como la guarnición perfecta para una cena romántica.
Esta es una de esas recetas que prácticamente se hace sola y con el mínimo de preparación requerida. Por lo general, hago papas solo con mantequilla, pero agregar un chorrito de aceite de oliva extra virgen hizo que los sabores realmente brillarán.
Consejo profesional para preparar papas cocidas
El tiempo de ebullición de las papas puede variar mucho según el tamaño, las papas pequeñas se pueden hacer en tan solo 8 minutos, mientras que las papas nuevas más grandes pueden tardar hasta 18 minutos. Prueba la cocción pinchando con un tenedor y cocina hasta que las papas estén tiernas.
Variaciones de esta receta de papas cocidas
Hay muchas opciones para preparar las papas hervidas. Puedes hacerlas simples o probar con alguna de estas sustituciones y adiciones:
Hierbas: puede usar perejil, eneldo fresco o cebollino, o una combinación de hierbas.
Sal: Puede usar una sal gruesa como la sal kosher o maldon, o una sal marina fina para sazonar las papas, solo agréguela al gusto.
Tocino: Saltee el tocino en una sartén y mezcle las papas con trocitos de tocino y grasa en lugar de mantequilla y aceite de oliva.
Parmesano: El parmesano recién rallado es una excelente guarnición para las papas hervidas.
Para acompañar: Esta receta de papas cocidas es perfecta para acompañar carne asada, pollo rostizado o algún lomo guisado de forma sencilla.
Lava las papas y corta las papas más grandes por la mitad para que los trozos de papa tengan el mismo tamaño.
Coloca las papas en una olla con agua con sal y cubre con una pulgada de agua. Lleva a ebullición, luego reduce el fuego y cocina a fuego lento hasta que las papas estén tiernas (10-18 minutos dependiendo del tamaño).
Escurre el agua y devuelve las papas a la olla (o a un tazón para mezclar).
Rocía la mantequilla derretida y el aceite de oliva sobre las papas.
Espolvorea con sal kosher y pimienta negra, agregando ambos al gusto.
Agrega perejil recién picado y revuelve para combinar
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