Los puristas de la pizza italiana quizá no estén tan de acuerdo con nosotros, pero como los buenos catadores todo terreno de pizzas que somos, creemos que uno de los elementos que mejor definen a esta receta son sus quesos. La masa, la salsa de jitomate o los demás toppings también tienen lo suyo solos o en conjunto, pero sin el queso una pizza no es pizza.
Hace poco descubrimos un sitio en la Ciudad de México donde cada orden que sale del horno es una oda a todos los quesos que apenas se derriten, nos hacen salivar. El lugar se llama Chiwawas Pizza, es diminuto y muy sorprendente.
¿Qué tienen de especiales sus creaciones?
Sus pizzas tradicionales son de un ingrediente y pueden ser hawaianas, vegetarianas, Cocker (con salchicha, peperoni, aceituna,morrón y champiñón), Akita (chorizo, tocino, aceituna y morrón), Doberman (cochinita pibil) y Pitbul (tocino, BBQ, peperoni, chorizo, champión y cebolla). En la mesa encontrarás una salsa de ajo con habanero súper picosa y una con mango más dulce. Ambas, muy recomendables.
No obstante, la especialidad de la casa (y lo que les ha granjeado muchos clientes y seguidores fieles en Instagram) son sus pizzas rellenas. Todas ellas llevan cualquiera de las coberturas antes mencionadas y cinco ediciones especiales más, pero encima de una base rebosante de queso, champiñón y espinacas.
Cortarlas es un deleite. El queso es tan abundante y está cocido a una temperatura tan alta, que sus hebras se elevan sin romperse en cada rebanada hasta medio metro sobre la base de la pizza. Comerte dos trozos implica empezar a sentir saciedad de inmediato, así que para no desperdiciar comida y probar la receta lo más calientita posible, es mejor ir en grupo y compartir.
Puedes pedir como complementos papas horneadas, panes de arrachera, choripanes plátanos con queso. Para tomar hay cervezas frías, malteadas y cafés.
¿De dónde el nombre?
Simple y sencillamente del amor de los dueños por los perritos. Cuentan que, cuando empezaron el negocio hace 5 años en una calle de Polanco cerca de donde están ahora, un perrito siempre llegaba y se echaba fuera del local. Ellos creen que les dio suerte en el negocio. De hecho, al observas de cerca el logo de la empresa se logra ver su silueta.
Por lo mismo, el restaurante es súper pet friendly. No dudes en darte una vuelta pronto y llevarte a tu mascota para que disfruten juntos de la tarde (y de una buena pizza con mucho, mucho queso).
Cheque promedio: $200. | ¿Dónde? Mariano Escobedo 81, Polanco.
