El fin de semana está a la vuelta de la esquina y ya empezamos con los antojos de postres deliciosos, sobre todo si te tocó llevar algo para la comida familiar de este fin, sobre todo si es algo para acompañar el café, esta receta te va a caer como anillo al dedo: una tarta de naranja con crema pastelera que está para chuparse los dedos y repetir como tres veces.
Esta tarta será muy accesible y fácil de preparar porque nuestros ingredientes no son extravagantes, no vienen de los lugares más recónditos del planeta; son naranjas y crema pastelera, que juntas van a ser un muy buen duo de sabores y sobre todo equilibrado. Nada de va a empalagar en este postre.
Recuerda que las tartas no son tan complicadas como siempre nos han hecho creer, incluso si quieres preparar la base desde cero es muy fácil una vez que estás en el proceso. Y recuerda que la práctica nos hace maestros, y los utensilios y los pequeños detalles nos vuelven la sensación del lugar.
Estos moldes reutilizables para tartas están increíbles porque no se nos va a deshacer su estructura a la hora de desmoldar. Puedes encontrarlos en Amazon México desde 335.
En una cacerola vamos a llevar a fuego medio el jugo y la ralladura de naranja. Cuando esté a punto de hervir lo retiramos del fuego y reservamos.
En un tazón agrega los tres huevos y el azúcar. Bate con un batidor de globo y ve agregando la fécula de maíz. Debe quedar sin grumos la mezcla.
Con ayuda de un colador agrega el jugo de naranja que hervimos, e integra todo perfectamente bien.
Vierte nuestra mezcla en la misma cacerola donde hervimos el jugo y llévala a fuego medio, mueve la mezcla hasta que empiece a espesar. Esto tomará de cinco a siete minutos.
Una vez que haya espesado nuestra mezcla, retiramos del fuego y le agregamos los 40 gramos de mantequilla.
Intégrala hasta que se funda la mantequilla con el calor de nuestra crema pastelera. Reserva.
En una licuadora o procesador de alimentos pulveriza tus paquetes de Galletas Marías. Luego llévalas a un tazón y agrega los 90 gramos de mantequilla derretida.
Comienza a amasar hasta que empiece a formarse la costra de nuestra tarta. Si tu molde es grande puedes hacer este proceso ahí mismo y comenzar a cubrirlo.
Si tus moldes son individuales, ve cubriendo uno por uno con la masa de la costra.
Una vez que estén listos y la crema pastelera de naranja esté a temperatura ambiente, viértela sobre los moldes.
Tapa tus moldes con papel film a piel (sin dejar espacio entre el papel y la crema). Refrigera por una hora.
Pasado el tiempo de refrigeración, agrega unas rodajas de naranja pelada encima de la crema pastelera para decorar.
¡Tu tarta ya está lista!
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