Prepara esta mezcla para crepas dulces con este ingrediente secreto que hace toda la diferencia para disfrutar este postre sencillo, riquísimo y para que te enamores más de ellas, es bien fácil hacer un pastel de crepas con chocolate.
Las crepas además de tener pocos ingredientes, combinan con todo: existen opciones saladas, dulces y mixtas. Hay de todo para todos los tipos de paladares y eso las hace una receta versátil para comerla a cualquier hora del día.
Con qué rellenar tus crepas dulces
Fresas rebanadas con leche condensada
Frambuesas enteras con crema batida
Rebanadas de plátano caramelizado con crema de avellanas
Cacahuate natural picado con caramelo líquido
Cacahuate garapiñado
Crema batida con duraznos en almíbar
Trucos para hacer crepas dulces
Usa el sartén adecuado: no siempre tenemos creperías, pero procura que tu sartén sea completamente plano, antiadherente o de cerámica.
Cocina a fuego medio: esta intensidad de calor evitará que se quemen o que se tarden una eternidad. El mejor tip es poner una gota de agua en la sartén antes de colocar la crepa. El chisporroteo y vapor de la gota significa que su sartén está lo suficientemente caliente como para comenzar.
La mezcla debe quedar fina: procura utilizar licuadora para que quede perfectamente ligera y fina.
Utiliza cerveza: en Francia es muy normal que integren cerveza a la preparación ya que las burbujas y la levadura de la cerveza ayudan a que la masa se afloje y se relaje, haciendo que la masa sea más tierna y fácil de untar. Si no te encanta la idea, agrega alguna bebida burbujeante.
Refrigerar hace toda la diferencia: el truco para hacer crepas infalibles cada vez es descansar y refrigerar la masa.
Vierte los ingredientes a la licuadora. Comienza por los ingredientes líquidos y sigue por los ingredientes secos. Es importante tamizar una o dos veces la harina para que la masa quede ligerita y sin grumos.
Derrite la mantequilla viértela sobre la mezcla. Revuelve bien una vez más.
Deja reposar nuestra masa en el refrigerador por al menos 1 hora. Recuerda taparla bien.
Calienta a fuego medio un sartén antiadherente plano. Haz la prueba de la gota de agua, unta tantita mantequilla y vierte un chorrito de masa, lo suficiente para que apenas y se cubra el fondo del sartén con una capa fina. Mueve para que se extienda bien y quede redonda, pero recuerda que es prueba y error.
Una vez que cambie la textura de la parte de arriba (se verá ligeramente cocida) es hora de voltear, termina de cocinar y resguárdalas tapadas para que no se endurezcan.
Ahora sí, rellena con lo que más te guste.
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