Cómo hacer un 'Volteado de piña' con la receta del chef Oropeza

Cuando andamos de antojo de algo dulce a veces nos detenemos porque pensamos que nos va a tomar una eternidad preparar algo rico porque seguro no tenemos nada listo para preparar. Déjame decirte que te puedes sorprender con la cantidad de cosas que puedes hacer con esa harina de trigo que tienes por ahí almacenada, así que vamos a aprender cómo hacer un volteado de piña para que sepa aún más rico.

Aprende a identificar una buena piña para tu volteado

Ayúdate del olfato

Aunque sientas que está extraño, huele el extremo del tallo: un aroma dulce te ayudará a escoger una buena piña madura. Si no huele a nada, probablemente no esté madura. A veces no podremos percibir el olor de inmediato, pero debes ser capaz de oler el aroma del tallo, donde probablemente sea más fuerte. Nota: evita las piñas que huelan fermentadas.

Hay que tocar, pero sin magullar

Aunque este es un clásico, la verdad a veces no es el mejor método para conseguir la mejor piña. Tenemos que apretar ligeramente con los dedos de una mano y el chiste es que la piña esté bastante firme, pero suave al tacto. Identificar el punto perfecto puede ser complicado, ya que su cáscara es bastante gruesa, pero la práctica hace al maestro.

Balancea la piña

Una piña más pesada significa que es más jugosa, porque el jugo adicional le da a la piña el peso adicional. Si tiene más jugo, también señala que es una piña más madura y dulce. Este es el tip más confiable, pero necesitamos hacer un disclaimer. Decir “más pesada” no significa “más grande”. El chiste es sentirla pesada en comparación con otras del mismo tamaño. Si una piña más grande te parece igual de pesada que una más pequeña, probablemente sea mejor que escojas la más pequeña.

Guíate por los colores

Una piña verde no necesariamente está sin madurar. Debes tener en cuenta que algunas piñas son consideradas maduras cuando siguen parcialmente verdes, sin embargo, la piña que escojas no debe estar verde o marrón por completo; la coloración amarilla debe ser visible a la vista en la base de la fruta. El color que aumenta más arriba en la piña a menudo indica que es más dulce.

Ingredientes

300 Gramos de margarina
3/4 Taza de azúcar
5 Pieza de huevo
1 Lata de leche condensada
3 Taza de harina cernida
2 Cucharadas de polvo para hornear
3/4 Taza de almíbar
1 Cucharadas de margarina
1/2 Taza de azúcar mascabada
4 Rebanada de piña en almíbar
4 Pieza de cerezas

Preparación

Precalienta tu horno a 200 ºC
Acrema en el tazón de tu batidora la margarina junto con el azúcar. Incorpora uno a uno los huevos y enseguida agrega la leche condensada.
Bate hasta obtener una mezcla homogénea.
Deja de batir y con la ayuda de un miserable, añade la harina y el polvo para hornear, mezclando con movimientos envolventes.
Vierte el almíbar y vuelve a incorporar.
Derrite la margarina restante en un sartén, agrega el azúcar mascabado y deja hasta disolver y formar un caramelo.
Cubre con el caramelo el fondo de un molde para pastel de 30 cm previamente engrasado y forrado con papel encerado.
Encima acomoda las rebanadas de piña y en lo centros coloca las cerezas.
Llena el molde con la mezcla para el bizcocho y hornea por 45 minutos o hasta que esté bien cocido.
Retira del horno, desmolda y deja enfriar ates de servir.