¿Alguna vez has probado tortitas de plátano dulces? Son el postre favorito de esta cocina, anhelamos tanto el resultado desde que comienza a prepararse el plátano, y ni hablar del plátano en preparaciones saladas como en enchiladas o guisados como lasaña de plátano macho, que aunque podría ser una combinación extraña saben delicioso. Hoy vamos a enseñarte cómo hacer masa de plátano macho para empanadas.
Esta masa para empanadas de plátano macho puedes rellenarla de queso crema, queso para gratinar, picadillo, chocolate y los ingredientes que más te gusten porque es super versátil para consumirlo con cualquier sabor. ¡Amamos el plátano macho!
Diferencia entre plátano macho y plátano Tabasco
El plátano tabasco es el que se suele consumir como snack, se emplea para licuados y para preparaciones de panqués; es amarillo en su punto de madurez y suele tener algunas pequitas café. La diferencia principal de estos dos es que el plátano macho es mucho más grande que el Tabasco, el macho tiene una cáscara más gruesa, es verde y cuando se madura es más morada a tonos café que pueden llegar a tornarse semi negros sin comprometer el contenido del plátano.
El plátano macho cuando está maduro tiene un sabor dulce que hace mancuerna hasta con ingredientes salados, también se dice que es más pesado de digerir que el plátano tabasco, que al igual es dulce aunque más tenue que el macho.
4 consejos para que la masa quede deliciosa y no se rompa
El consejo principal la paciencia; la textura del plátano macho es muy gentil para maniobrarla, solo tienes que amasarla lo suficiente para que su misma elasticidad la mantenga unida, eso también dependerá de que no le agregues humedad extra con el relleno.
Si decides hervir los plátanos machos (nosotros te recomendamos que sí) agrega agua suficiente para que se tapen por completo y una raja de canela para aromatizarlo.
Si el relleno de tus empanadas es salado, sustituye el azúcar por una pizca de sal. Esto hará que se realcen los sabores.
Si es muy suave la masa, añade 1 cucharada de harina para todo uso y una cucharadita de sal.
Lava los plátanos para eliminar suciedades. Colócalos en una olla con agua suficiente para que se cubran, agrega la canela y lleva a hervir por 40 minutos. Puedes pelar los plátanos antes de cocinarlos, pero así es como los hacemos en casa y nos da un resultado perfecto garantizado.
Retira los plátanos del fuego cuando estén cocidos por dentro, (introduce un cuchillo para saber que están suaves), retira la cáscara y colócalos en un tazón.
Machaca los plátanos cocidos con cuidado de no quemarte por lo calientes que están. Comienza a manipular la masa con movimientos envolventes y de ser necesario agrega un poco de azúcar y canela de Saigón en polvo. Amasa por 5 minutos al menos o hasta que esta se despegue del tazón.
Si es muy suave la masa, añade 1 cucharada de harina para todo uso.
Parte el queso crema en rebanadas o porciones ideales para las empanadas. Comienza a darle forma de tortilla ovalada gruesa a una porción de la masa y en medio agrega el queso crema o el relleno de tu preferencia, dobla la empanada y presiona ligeramente los bordes.
Coloca aceite vegetal en aerosol o líquido y cuando esté bien caliente ya puedes agregar tus empanaditas para sellarlas y darles una textura crujiente por fuera. También puedes hacerlo en freidora de aire. ¡Disfruta!
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