¿Buscas un postre rápido y con un sabor irresistible? La gelatina de cajeta es la opción perfecta, ya que con una receta súper sencilla y solo 3 ingredientes, podrás disfrutar de esta delicia casera en cuestión de minutos.
Solo deberás seguir los pasos del famoso canal "Pasteles La MoreliAna", te aseguramos que el resultado será una gelatina suave y cremosa, con el auténtico sabor de la cajeta.
Cómo hacer cajeta o dulce de leche con leche condensada
Hacer cajeta o dulce de leche con leche condensada es una forma rápida y sencilla de disfrutar de este delicioso postre. A continuación, te compartimos una receta muy fácil:
Ingredientes:
- 1 lata de leche condensada
Procedimiento:
- Retira la etiqueta de la lata de leche condensada y asegúrate de que esté completamente cerrada y sin daños.
- Coloca la lata en una olla grande y cúbrela completamente con agua. Es importante que el agua cubra la lata al menos por 2-3 centímetros.
- Lleva el agua a ebullición. Una vez que esté hirviendo, reduce el fuego a medio-bajo y deja que la lata se cocine en el agua durante 2 a 3 horas. Cuanto más tiempo la cocines, más oscuro y espeso será el cajeta.
- Asegúrate de que la lata esté siempre cubierta con agua. Añade más agua caliente si es necesario durante la cocción.
- Después de que haya pasado el tiempo de cocción deseado, apaga el fuego y deja que la lata se enfríe completamente en el agua antes de abrirla. Esto puede tomar varias horas, pero es importante para evitar cualquier accidente por presión.
- Una vez fría, abre la lata con cuidado y verás que el contenido se ha transformado en deliciosa cajeta. Puedes usarlo para untar en pan, rellenar postres o simplemente disfrutarlo solo.
Ideas para decorar una gelatina de cajeta
- Frutos rojos: Fresas, frambuesas, zarzamoras o arándanos le dan un toque de color y acidez que contrasta muy bien con la dulzura de la cajeta.
- Crema batida: Una capa de crema batida encima de la gelatina le añade suavidad y elegancia. Puedes agregarle un toque de vainilla o canela para darle más sabor.
- Chocolate rallado: El chocolate oscuro o con leche rallado es una opción clásica y deliciosa para decorar postres.
- Nueces picadas: Las nueces, almendras o avellanas picadas aportan textura y un sabor más intenso a la gelatina.
- Caramelo líquido: Puedes hacer hilos de caramelo líquido para decorar la superficie de la gelatina y darle un toque sofisticado.
- Galletas trituradas: Puedes utilizar galletas María, galletas de animalitos o cualquier otra galleta que te guste para decorar la superficie de la gelatina.
- Miel: Un hilo de miel sobre la gelatina le dará un brillo y un sabor extra.
- Polvo de cacao: Espolvorea un poco de polvo de cacao sobre la crema batida para crear un contraste de colores.
- Chispas de chocolate: Las chispas de chocolate le darán un toque divertido y festivo a tu gelatina.
- Mezcla las 8 cucharadas de grenetina en 1 taza de agua fría con ayuda de un tenedor. Deja reposar durante 5 minutos para que se hidrate perfectamente.
- Coloca 2 litros de leche en una cacerola y calienta, integra la cajeta o dulce de leche y remueve hasta que se disuelva con ayuda de un batidor de globo. Retira del fuego.
- Integra la grenetina hidratada y remueve de 3 a 5 minutos para que se disuelva perfectamente.
- Coloca la cacerola en un recipiente más grande con hielos. Remueve por 5 minutos.
- Vierte la mezcla de gelatina en un molde (puede ser engrasado). Refrigera durante al menos 3 horas o hasta que esté firme.
- Para desmoldar, pasa un cuchillo por los bordes del molde y coloca encima un plato, gira y verás como de desprende fácilmente.
- Sirve con un poco de caramelo y nueces en trocitos.
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