Las carlotas son uno de los postres más buscados en la temporada de calor porque se sirven fríos y no se necesita prender el horno para hacerlos. El ingrediente que es indispensable suelen ser las galletas o soletas, pero hoy te compartimos una forma de hacer carlota sin galletas ni horno que te va a sorprender.
Se cree que este postre fue creado en Francia a principios del siglo XIX cuando un chef de la aristocracia de la época preparó una versión de pastel o tarta delicada y fresca. En México es muy popular, sobre todo la versión que se prepara con galletas María y crema de limón hecha con leche condensada.
Cómo hacer carlota sin galletas
Si no tienes galletas en casa o simplemente quieres probar una forma de hacer carlota diferente, lo que necesitas es preparar una mezcla de mantequilla y harina de trigo que se cocina en la sartén hasta que se dora. Esta preparación tiene la textura de migas de galleta o de pan y, cuando se aplasta formando capas, queda como la base de galleta de las tartas o la capa de galleta de las carlotas.
Nos inspiramos en la receta de tarta Plombir del canal de YouTube Recetas de Esbieta para hacer esta versión de pastel en capas o carlota, Les recomendamos visitar este canal, ya que la creadora de contenido comparte recetas muy originales y diferentes.
Con qué saborizar esta carlota sin galletas
Para darle un toque especial a esta preparación base, puedes agregar frutas, chocolate, esencias y más. El cielo es el límite.
Añade trocitos de durazno o mango en almíbar a la crema de vainilla.
Cambia el azúcar de la crema por miel de abeja para darle un toque especial.
Agrega un par de cucharadas de cocoa o cacao en polvo a la crema para darle sabor a chocolate.
Agrega un chorrito de esencia de coco a la crema para dar un sabor tropical.
Aromatiza la crema con ralladura de naranja o limón, le dará un delicioso sabor cítrico.
- En un recipiente coloca la harina de trigo cernida. Ralla la mantequilla fría sobre la harina y el azúcar, y ve integrando para evitar que se forme una bola de harina y mantequilla.
- Con tus manos forma bolita o migas con la harina y la mantequilla, tiene que verse como una especie de arena.
- En un sartén caliente, dora la mezcla de harina y mantequilla hasta que tenga un color dorado tipo nuez. Reserva hasta que se enfríe.
- En un bowl grande mezcla los huevos, el azúcar, la esencia de vainilla y la fécula de maíz. Integra muy bien.
- Calienta la crema para batir y cuando esté caliente añade a la mezcla de huevos de golpe sin dejar de mover para evitar que se cocinen los huevos.
- En una olla, cocina la crema sin dejar de mover hasta que esté completamente espesa y se despegue de la cacerola. Añade los cubos de mantequilla cuando siga caliente y una pizca de sal. Deja que se enfríe.
- En un molde desmoldable o un refractario forma capas de la mezcla de harina, aplastándola un poco para formar una base e intercalando con capas de crema.
- Refrigera durante toda la noche y sirve.
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