Para hornear pescado de forma exitosa, es decir, evitar que se pegue y manteniendo su jugosidad y sabor, se requieren algunos cuidados y técnicas específicas, así que, a continuación, te compartimos algunos trucos navideños que te sacarán de apuros...
Si aún no sabes qué preparar para la Cena de Navidad o de Fin de Año, una alternativa es consumir uno de los productos del mar, pues caen menos pesados respecto al lomo o al pavo relleno y son igual de deliciosos.
Tips para hornear pescados sin que se quemen, peguen y mantengan su jugosidad y sabor
Antes que nada, elige el pescado adecuado, ya que no todos son iguales para hornear ni quedan con un buen sabor:
Los pescados blancos, como la merluza, el lenguado o la corvina, son los más adecuados para este método de cocción, pues tienen carne firme y no se desmoronan fácilmente. Otras opciones son el salmón, la tilapia o la trucha.
Limpia el pescado y retira las escamas, las vísceras y la cola. Si el pescado tiene piel, puedes dejarla o retirarla. Si decides retirarla, hazlo con cuidado para no romper la carne.
Puedes salpimientar el pescado al gusto. También puedes añadir otras especias o hierbas aromáticas, como ajo, perejil, orégano o romero.
Puedes marinar el pescado antes de hornearlo para darle más sabor. Las marinadas con base de aceite de oliva y limón son populares y le dejarán un gran sabor.
Precalienta el horno a 180 grados centígrados antes de cocinar el pescado.
Forra una bandeja para hornear con papel de aluminio o papel encerado, ay que esto ayudará a evitar que el pescado se pegue. Puedes colocarlo entero o en filetes. Si colocas el pescado entero, coloca la parte de la piel hacia abajo.
Rocía el pescado con un poco de aceite de oliva o unta mantequilla, pues estos ingredientes ayudarán a que el pescado se dore, mantenga sus jugos y no se reseque.
Hornea el pescado durante 20-25 minutos, o hasta que esté cocido. El tiempo de cocción puede variar según el grosor del pescado.
Evita sobrecocinar el pescado para mantener su jugosidad. Retira el pescado del horno cuando se desmenuce fácilmente con un tenedor.
Deja reposar el pescado durante unos minutos antes de servirlo. Esto ayudará a que los jugos se redistribuyan y el pescado quede más jugoso.
Cocina el pescado empapelado (envuelto en papel encerado o papel de aluminio). Esto ayuda a retener la humedad y la concentrar los sabores.
Agrega líquidos como caldo, vino blanco o jugo de cítricos alrededor del pescado para mantenerlo jugoso.
Si quieres dorar la parte superior del pescado al final de la cocción, puedes usar la función de broil durante unos minutos. Mantente atento para evitar que se queme o también puedes añadir un poco de queso parmesano rallado o pan rallado por encima.
También puedes hornear el pescado con una cama de verduras, como patatas, zanahorias o cebollas. Esto ayudará a que el pescado quede más jugoso y tenga un sabor más intenso.
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