La salsa de soya es un ingrediente que la gran mayoría de nosotros asociamos con la comida oriental o asiática, sin embargo, es uno de esos ingredientes de sabor salado y profundo que puede darle vida a muchísimas recetas, sin importar que no sean de esas culturas.
De allí, que para mí, la salsa de soya sea un ingrediente que siempre tengo a la mano en mi despensa y por lo que, hoy les invito a descubrir qué otros usos darle a la salsa de soya en nuestra cocina para resaltar el sabor de nuestros platillos.
Intensificar el sabor de la carne
La salsa de soya es rica en glutamatos libres, mismos que desempeñan una función en el sabor y la aceptabilidad de los alimentos. Dichos glutamatos logran intensificar el sabor de la carne. Es por ello que suele agregarse a la salsa para marinar costillas de cerdo, preparar albóndigas de carne, a pechugas de pollo asadas, asados de carne de ternera e incluso carnes ahumadas.
Mejorar las salsas
La salsa de soya también aporta un sabor interesante y profundo a las salsas hechas a base de caldos de carnes rojas, de pavo o de pollo, e incluso a base de caldo de pescado. Un ejemplo de estas salsas es el gravy que suele prepararse para acompañar el pavo de Navidad, o también el gravy de pollo con el que bañamos el puré de papa.
Hacer más interesantes las recetas veganas y vegetarianas
Muchas de las proteínas veganas como son el tofu, el tempeh o la carne de soya no siempre tienen un sabor profundo y atractivo, pero son ingredientes que quienes llevan esta dieta deben incluir en una alimentación balanceada.
Debido, nuevamente, a los glutamatos de la salsa de soya, podemos lograr que estas proteínas sean más interesantes y tengan un gran sabor. Otro de los ingredientes de este tipo de cocina que se ve beneficiado son los hongos, ya sea en forma de champiñones, setas o hongos portobello.
Para las sopas
Unas gotas de salsa de soya también son bien recibidas por casi todos los tipos de sopas y caldos, como por ejemplo, una sopa de verduras, un estofado e incluso, podemos usarla para mejorar el sabor de una sopa en lata que hemos adquirido en el supermercado.
Salsas para marinar, aderezos y vinagretas
La salsa de soya contiene unas enzimas que ayudan a romper las proteínas resistentes, por lo que añadirlas a las salsas para marinar carne es una gran idea, pues ayudará a ablandarlas y lograr que queden con una textura más suave y jugosa.
Para las ensaladas, podemos también incorporar un poco de salsa de soya en las vinagretas o en los aderezos, aunque asegurándonos de no añadir sal de más para evitar que nos queden muy salados.
Salsas embotelladas
Hay que ser sinceros al aceptar que no siempre tenemos tiempo para preparar algunas salsas, como por ejemplo, la salsa barbecue que tanto nos gusta añadir a las alitas de pollo o a las costilla. Siendo más sencillo conseguir esta salsa embotellada, una buena idea para balancearla es añadir un poco de salsa de soya, y así evitar aquel sabor extra dulce que caracteriza a estas salsas embotelladas.
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