Cómo germinar las pepitas de calabaza en casa: no las vayas a tirar

¿Te gustaría disfrutar de calabazas frescas y cultivadas en tu propia casa? Es más fácil de lo que crees, pues con un poco de paciencia y los cuidados adecuados, podrás hacerlo. Te revelamos cómo germinar las pepitas de calabaza en casa: no las vayas a tirar,

Germinar tus propias pepitas de calabaza es muy fácil solo necesitas unas herramientas que seguro tienes a la mano para después descosechar deliciosos frutos. En esta guía te explicaremos paso a paso cómo hacerlo.

¿Qué son las calabazas?

Las calabazas son una de las especies cultivadas que se utilizan de manera integral, principalmente como alimento, aunque también hay aplicaciones medicinales para algunas de sus partes, como las hojas y la raíz.

Seguramente has probado semillas de calabaza, conocidas comúnmente como “pepitas”, que pueden encontrarse con o sin cáscara, saladas y tostadas. Pero, ¿sabías que la calabaza es uno de los cultivos que fueron domesticados en México hace más de 8,000 años?

La calabaza tierna se consume como verdura, mientras que la pulpa de la calabaza madura es su principal uso, y en algunos casos, la cáscara se utiliza como recipiente. Además, se aprovechan las semillas, las flores y las pepitas, por supuesto.

Cómo germinar las pepitas de calabaza en casa

Para germinar las pepitas de calabaza en casa vas a necesitar:

Pepitas de calabaza frescas
Un vaso o recipiente transparente con agua tibia
Una servilleta de papel o paño limpio.
Un plato o bandeja poco profunda

Procedimiento:

Lava las pepitas suavemente con agua fría para eliminar cualquier residuo.
Sécalas con un paño limpio.
Llena el vaso o recipiente con agua tibia hasta aproximadamente 2/3 de su capacidad.
Coloca las pepitas en el agua, asegurándote de que queden completamente sumergidas.
Cubre el vaso con una servilleta de papel o un paño limpio para mantener la humedad y evitar contaminaciones.
Coloca el vaso en un plato o bandeja poco profunda para recoger cualquier agua que pueda gotear.
Cambia el agua diariamente para prevenir el crecimiento de bacterias.
Mantén el recipiente en un lugar cálido (entre 25°C y 30°C) y con poca luz directa.
Después de 24-48 horas, deberías empezar a ver signos de germinación, como pequeñas raíces blancas emergiendo de las semillas.
En 3-5 días, la mayoría de las pepitas deberían haber germinado completamente.
Una vez que las raíces hayan crecido entre 1-2 cm, estará listo para trasplantarlas en macetas o directamente en el jardín.