Devolver el filo a tus cuchillos de forma casera puede parecer una tarea muy complicada, sin embargo, hoy te queremos compartir 3 trucos caseros y muy prácticos para devolver el filo a tus cuchillos.
¿Cómo se puede determinar si un cuchillo requiere ser afilado?
Hay varias formas de verificar esto, pero una manera perfecta y sencilla es utilizando papel. Todo lo que tienes que hacer es sostener el cuchillo con el filo hacia arriba, pasar el papel aplicando una ligera presión hacia abajo y deslizarlo. Si el cuchillo corta el papel de manera limpia, entonces no es necesario afilarlo. Sin embargo, si el corte no es preciso, es momento de utilizar este práctico truco.
¿Cómo se puede devolver el filo a los cuchillos?
Método 1: Un afilador de cuchillos de cerámica o acero es una herramienta efectiva y fácil de usar. Simplemente pasa el filo del cuchillo a lo largo de las ranuras de la herramienta siguiendo el ángulo adecuado. Esto realinea y afila la hoja de manera rápida.
Método 2: Utilizar una piedra de afilar es un método tradicional para afilar cuchillos. Debes sumergir la piedra en agua durante unos minutos y luego frotar el filo del cuchillo en movimientos circulares manteniendo el ángulo donde te acomodes. Este método requiere más práctica que un afilador, pero da un control preciso sobre el afilado.
Método 3: Si no tienes acceso a herramientas de afilado, puedes utilizar el borde no vidriado de una taza de cerámica. Voltea la taza boca abajo y, con un ángulo de aproximadamente 20 grados, desliza suavemente el filo del cuchillo hacia abajo a lo largo del borde de la taza. Repite este proceso varias veces en ambos lados del filo hasta que recupere su uso.
Toma en cuenta, que es importante mantener un ángulo favorecedor mientras afilas tus cuchillos para evitar dañar el filo o crear bultos en la hoja. También, es recomendable pasar el cuchillo en movimientos suaves, aplicando una presión uniforme.
Un cuchillo bien afilado no solo facilita la preparación de alimentos, sino que también reduce el riesgo de accidentes al cocinar, así que revisa de vez en cuando, cómo se encuentra el filo de este utensilio.
Consejos para mantener los cuchillos afilados
- Lava los cuchillos a mano con agua tibia y jabón. Evita usar el lavavajillas, ya que puede dañar el filo.
- Sécalos inmediatamente después de lavarlos.
- Guárdalos en un lugar seguro, lejos de otros objetos afilados.
- Afila tus cuchillos con regularidad.
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