Encontramos una receta de patitas de pollo en air fryer y como sabemos que, aunque son un ingrediente cont roversial, las amas o las odias, tuvimos que probarla. El resultado es una botana de patas de pollo picosa con un sabor intenso y una textura súper especial.
La salsa de esta receta es una combinación de sabores populares en la cocina asiática como salsa siracha, jengibre, ajo y salsa de soya creando una mezcla de sabores muy especial.
Por si fuera poco, puedes preparar esta receta, creación de Yanis Arvanitaris, creador de contenido de gastronomía, en air fryer, haciendo que las patitas de pollo queden crujientes y caramelizadas.
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Datos curiosos sobre las patas de pollo
Esta parte de los pollos no solo destaca en muchas recetas mexicanas como esquites, caldos o botanas, sino que también es una proteína mucho más apreciada de lo que se piensa comúnmente. Aquí les presentaré datos fascinantes sobre ella.
Abundantes en proteínas: A pesar de su tamaño reducido, las patas de pollo son una fuente considerable de proteínas, lo que las convierte en una opción nutritiva para integrar en la alimentación.
Famosas en la cocina asiática: En las cocinas asiáticas, las patas de pollo son consideradas una exquisitez. Se preparan de diversas maneras, ya sea al vapor, fritas, en salsas agridulces o en sopas.
Textura gelatinosa: La textura gelatinosa de las patas de pollo, atribuida a su alto contenido de colágeno, las hace ideales para agregar consistencia y cuerpo a caldos y sopas durante la cocción.
Utilizadas en la medicina tradicional china: En la medicina tradicional china, se les atribuyen propiedades benéficas para las articulaciones, por lo que son frecuentemente empleadas en caldos y guisos para fortalecer huesos y articulaciones.
Variedad de texturas cocinadas: Con una preparación adecuada, las patas de pollo pueden adquirir diversas texturas, desde suaves y tiernas hasta crujientes y pegajosas, según el método de cocción utilizado.
Consumo global: Aunque su popularidad varía según la región, las patas de pollo son consumidas en numerosos países de Asia hasta América Latina, donde se utilizan tanto en platos tradicionales como en la comida callejera.
1. Limpia las patas de pollo cortando las puntas y el interior. 2. Pela el jengibre y córtalo en rebanadas. En una cacerola agrega abundante agua, el jengibre y las patas de pollo. Cocina hasta que estén cocidas y su color haya cambiado. 3. Saca de la cacerola y seca. 4. Agrega el resto de los ingredientes. 5. Cocina en la freidora de aire durante 12 o 13 minutos a 190 º C.
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