La CDMX alcanzó ayer, 15 de abril, un récord histórico de calor, pues se registró una temperatura máxima de 34.2°C, de acuerdo con el Servicio Meteorológico de la Comisión Nacional del Agua. Si buscas refrescarte, una gran opción es esta receta de agua cremosa de mango.
Así que aprovecha la temporada de esta fruta y prepara esta delicia refrescante y cremosita con los tips de Cocinablog Oficial, ¡te va a encantar!
Consejos para elegir los mejores mangos
- Color: El color del mango no siempre es un buen indicador de madurez, ya que algunas variedades pueden permanecer verdes incluso cuando están maduras. Sin embargo, en general, los mangos maduros suelen tener un color amarillo, naranja o rojo.
- Piel: La piel del mango maduro debe ser ligeramente arrugada y ceder ligeramente a la presión. Si la piel está verde y dura, el mango no está maduro. Si la piel está muy arrugada o blanda, el mango puede estar pasado.
- Tallo: El tallo del mango maduro debe ser de color marrón o negro. Si el tallo está verde, el mango no está maduro.
- Suavidad: El mango maduro debe ser ligeramente suave al tacto. Si el mango está duro, no está maduro. Si el mango está muy blando, puede estar pasado
- Aroma: Los mangos maduros tienen un aroma dulce y afrutado que se intensifica a medida que maduran. Si el mango no tiene ningún aroma, no está maduro. Si el mango tiene un aroma fuerte y fermentado, puede estar pasado.
Cómo hacer que los mangos maduren rápidamente
- Los mangos maduran mejor a temperatura ambiente. Puedes colocar los mangos en una bolsa de papel para ayudar a atrapar el etileno, un gas que ayuda a que la fruta madure.
- Colocar los mangos junto a otras frutas que producen etileno, como manzanas o plátanos, puede ayudar a que maduren más rápido.
- Evite exponer los mangos a la luz solar directa o a temperaturas altas, ya que esto puede hacer que se maduren demasiado rápido o se pudran.
- Corta los mangos de manera que el hueso quede al centro. Retira la pulpa con una cuchara, será más fácil de esta manera. Con el trozo del hueso igualmente retira la mayor parte de pulpa.
- Corta la pulpa resultante del mango en trozos y coloca en la licuadora junto con un poco del agua. Mezcla hasta que se integren perfectamente.
- Pasa la pulpa por un colador de malla fina y coloca en una jarra con suficiente agua; esto a fin de que las fibras del mango no se pasen y sea más agradable al paladar.
- Licúa las latas de leche evaporada y la de leche condensada hasta que se integren.
- Vacía esta mezcla cremosa de leches a la jarra con la pulpa del mango: combina todos los ingredientes.
- Si buscas una opción reducida en azúcar puedes reemplazar la leche condensada y agregar 4 sobres de Stevia por cada litro de agua.
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