Hemos escuchado mil veces que las mujeres somos más lloronas que los hombres. Y al parecer no solamente son expresiones, existen estudios que lo corroboran. Pero ¿sabías que las lágrimas de los hombres y de las mujeres son diferentes?
Bioquímicamente la composición de las lágrimas es muy similar a la de la saliva, entre otras cosas, están hechas de proteínas, sal y hormonas. Existen dos tipos de lágrimas, las lágrimas irritantes que son aquellas que se utilizan para “lavar” a los ojos de la tierra, el polvo y de basuritas. Las lágrimas emocionales se desprenden ante un estímulo emocional o dolor físico, se ha comprobado que este tipo de lágrimas tienen mayor contenido de proteínas.
Según la Sociedad Alemana de Oftalmología, las mujeres lloran, en promedio, 5.3 veces al mes y los hombres solamente 1.4 veces. En cuanto al tiempo, la sesión de llanto de una mujer promedio es de seis minutos, y la de un hombre de dos a cuatro minutos. Estos datos son reales para la edad adulta, porque hasta los 13 años, tanto los niños como las niñas lloran igual.
La razón por la que empezamos a llorar también es diferente. Al parecer las mujeres lloramos cuando nos sentimos inadecuadas, cuando estamos frente a una situación difícil de resolver o cuando recordamos eventos pasados. En cambio los hombres lloran por empatía o cuando una relación sentimental falla.
Siempre relacionamos la diferencia en llanto con factores culturales, desde pequeños se les enseña a los niños que “llorar es para las niñas”. Sin embargo también existen explicaciones fisiologías a estas diferencias. Al llegar a la pubertad, el cuerpo de los niños se llena de testosterona y el de las niñas de prolactina, y estas hormonas afectan el desarrollo de las glándulas lagrimales.
Microscópicamente, las células de las glándulas lacrimales son diferentes en ambos sexos. Los conductos lagrimales de los hombres son más largos que los de las mujeres, así que es probable que las lágrimas de las mujeres lleguen más rápido a sus cachetes. Una de las hormonas que se encuentra en las lágrimas es la prolactina, un catalizador de la lactancia y de la producción de las lágrimas. Una mujer de 18 años, tiene entre un 50-60% más prolactina en su cuerpo que un hombre.
Para que te des una idea del efecto de las hormonas en el llanto; se dice que las mujeres menores de 45 años tienen 10 veces la misma probabilidad de llorar en el trabajo que los hombres mayores de 45 años. Esto porque cuando los hombres envejecen, sus niveles de testosterona disminuyen.
Además los humanos somos los únicos que al parecer lloramos por emociones. Al parecer esto es una consecuencia evolutiva, cuando nos volvimos seres sociales y empezamos a tener conciencia sobre nosotros mismo y las personas que nos rodean. Empezamos a desarrollar la capacidad de sentir compasión y empatía, y esto se asocia con el reconocimiento de gestos faciales que se asocian con emociones como sufrimiento, tristeza y enojo.
Así que una mujer y un hombre pueden experimentar el mismo nivel de emoción, pero el cuerpo de un hombre es menos propenso a producir lágrimas. A pesar de que es muy difícil estudiar los cambios fisiológicos ocasionados por emociones, porque todo es subjetivo. En resumen, las mujeres lloramos más que los hombres, por más tiempo y con más drama.
Imágenes | Giacomo Carena | honikum | beachateau |
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