Un nuevo estudio revela que en los últimos años se ha dado un cambio en la percepción de la obesidad de los padres hacia sus hijos. En la actualidad los padres son menos precisos al hacer estimaciones sobre el peso saludable de sus hijos, sobre todo si se comparan con padres de una generación anterior. El problema es que si las mamás y los papás no ven el problema, no pueden ser parte de la solución.
En las últimas décadas se ha visto un incremento significante en la obesidad infantil, y según resultados del estudio, la percepción del peso ideal socialmente aceptable también está cambiando. Más de tres cuartas partes de los niños con sobrepeso fueron juzgados por sus padres como que tenían el peso adecuado para su edad.
Lo que los estudios demuestran es que con el paso de los años, los niños llegan a pesar más antes de que sus padres detecten que tienen un problema de sobrepeso. La capacidad de los padres para identificar que sus hijos tienen sobrepeso se ha reducido en un 24%. Uno de los factores es que los padres comparan a sus hijos con los demás niños, pero si los demás niños también tienen sobrepeso es difícil identificar cambios negativos en el peso.
El estudio se realizó por investigadores de la Universidad de Georgia del Sur en Statesboro, Nueva York, y por investigadores de la Universidad Fundan de Shangai, China. Aunque no existen estudios que midan la percepción de los padres mexicanos, es muy probable que se apliquen las mismas observaciones encontradas en este estudio.
Imagen | U.S. Department of Agriculture
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