A pesar de todos los dulces que los niños reciben en Halloween, la mayoría de las recetas para esta época son dulces, así que en esta ocasión quise compartirles una receta salada. Se trata de unos huevos de telaraña. Ideales para el desayuno ¿no creen?
En lugar de utilizar colorantes artificiales, decidí utilizar moras azules congeladas para darles ese look escalofriante. Para que el color fije bien, es súper importante que los prepares una noche antes y los dejes toda la noche reposando.
Ingredientes
2 huevos, ½ taza moras azules congeladas, ½ cucharadita sal.
Preparación
En una olla coloca los huevos, las moras azules y la sal. Cubre con suficiente agua.
Coloca en el fuego y lleva a ebullición. Hierve a fuego bajo por 15 minutos. Apaga y deja reposar unos 5 minutos.
Con cuidado porque están calientes, saca cada huevo y con la ayuda de una cuchara, haz pequeñas grietas en el cascarón. Puedes presionar un poco.
Coloca los huevos en un recipiente con tapa y vacía el agua de moras azules. Lo ideal es que el agua cubra los huevos por completo. Deja que se enfríen y después refrigera toda la noche, por lo menos 6 horas.
Al día siguiente, con cuidado, pela los huevos (Es la parte más difícil, porque tienes que tener paciencia para no romper la capa súper delgadita donde queda el color).
Degustación
Al momento de servir los huevos de telaraña, yo esparcir un poco de sal negra, pero si tienes a la mano ajonjolí negro quedaría súper bien. Los puedes servir en el desayuno o mandarlos de lunch.
Porciones | 2 Dificultad | Fácil
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