Las pizzas caseras siempre serán mucho más ricas ya que corresponden a lo que realmente queremos comer, con los ingredientes exactos y con las cantidades que más nos satisfacen. Sin embargo hacer la masa de pizza puede llegar a ser pesado, principalmente si no contamos con mucho tiempo. Existen opciones de masas comerciales que se encuentran en los supermercados que también son una buena opción.
Sin embargo existe una alternativa que descubrí hace poco navegando en línea que me pareció bastante curiosa: usar pan de caja como base de pizza. La receta que les propongo hoy es la de una pizza de pimiento y jamón hecha con pan de caja. El resultado es bastante interesante y les va a sorprender. Se las recomiendo para una comida o hasta como botana si la cortan en cuadritos.
Esta sencilla receta la podrás hacer con los utensilios básicos de cualquier cocina, tan solo vas a necesitar utilizar una bandeja para hornear y un cuchillo filoso para picar los ingredientes que le vamos a agregar a la pizza.
Directo al Paladar | Cómo hacer una deliciosas tortitas de ejotes
Directo al Paladar | Atún a la mexicana. Receta fácil y saludable
Les recomiendo usar pan sin orillas pero si las tiene no es un problema. Para hacer la receta van a colocar una hoja de papel de cocción sobre una charola y acomodar las rebanadas de pan sobre la misma. Ahora van a poner a hervir los jitomates en una olla con medio litro de agua, por diez minutos. Los van a pelar y dejarlos en el agua.
Cortan la cebolla en trozos que agregan a la olla del jitomate. Añaden igualmente el diente de ajo y las finas hierbas. Sazonan con sal, pimienta y licúan todo muy bien, hasta obtener una salsa espesa. Recubren los panes con la salsa de jitomate que acaban de hacer. Pican el pimiento, el jamón y los añaden a la pizza. Sazonan al gusto y terminan con el queso rallado. Hornean por unos 30 minutos a 180ºC aproximadamente.
Degustación
Esta riquísima pizza de pimientos hecha con pan de caja se disfruta muy bien junto con una ensalada de hojas verdes y una cerveza clara bien fría. Si la van a servir fría será una botana perfecta, cortándola en cuadritos para que cada quien se sirva con la mano. Si la quieren recalentar les recomiendo hacerlo en el horno y no en el microondas.