Es muy difícil decidir cuál es tu parte favorita de las cenas navideñas y de fin de año; la lucha está reñida entre los platos fuertes, los cócteles, la bailadera o ese momento para el que todos tenemos tiempo aunque ya no tengamos espacio en el estómago: el postre. En esta ocasión te compartiremos un postre muy sencillo pero delicioso, perfecto para preparar en un dos por tres: el clásico pastel 'Niño envuelto'.
Este pastel, además de ser muy simple de preparar, es una delicia y una receta que salvará el pellejo de la persona que dejó el la preparación del postre para el final. En realidad es muy similar al pastel de tres leches, como si fuera un Strawberry Short Cake, pero en un rollito. Muy jugoso, muy rico y muy bonito ¡Te va a encantar!
¿Por qué se le llama 'Niño envuelto'?
Este nombre se le debe más bien al tipo de técnica con el que se prepara, ya que es una forma de "enrollado" muy similar a en la que se cubría a los bebés cobijas o mantas, con los brazos adentro.
Hay veces en las que nos podemos confundir porque hay muchas recetas de 'Niño Envuelto' que viran desde los sabores dulces hasta los salados y picosos, como en este rollito de niño envuelto de bistec que te compartimos antes. Por ejemplo, en Argentina, Uruguay y en Chile es mucho más común encontrar recetas similares a la anterior; por otro lado, acá en México tenemos ambas, la versión dulce y esta versión dulce, como un pastel muy tradicional.
Para el bizcocho
Comenzamos engrasando la bandeja en la que vas a hornear el bizcocho con mantequilla o aceite en aerosol. Colocamos papel encerado en el interior cubriendo los costados y reservamos dentro del refrigerador.
En un bowl, vertimos los ingredientes líquidos para el bizcocho (el jarabe de maíz, el extracto de vainilla y los huevos) y batimos con una batidora (eléctrica o de globo) hasta que comiencen a esponjar. Una vez que esté listo, integramos la harina lentamente. Sigue batiendo hasta que no haya grumos.
Vertimos la mezcla de bizcocho sobre la charola fría y metemos al horno por 8-10 minutos a 180ºC. Checa que el interior del pan esté cocido y retira del horno, esperamos unos minutos hasta que puedas manipular el bizcocho sin quemarte.
En una superficie limpia, colocamos un trapo o una manta de cielo, ligeramente húmeda. Saca el bizcocho de la bandeja y volteamos sobre la tela. Debe quedar el papel encerado en la parte de arriba.
Enrolla sin quitar el papel encerado y déjalo reposar a temperatura ambiente.
Para el relleno
En un bowl colocamos la crema para batir (fría) y la batimos hasta que esponje un poco. Cuando esté lista, agrega poco a poco el azúcar glas y la vainilla. Continuamos batiendo hasta que esponje y la mezcla esté cremosa. Reservamos en el refrigerador.
Ahora desenrollamos el bizcocho. Con una espátula, servimos la crema a lo largo y ancho del pan, dejando 2-3 centímetros en las orillas para dar espacio y evitar que la mezcla se desborde.
Colocamos las rebanadas de fresas sobre el bizcocho.
Enrollamos de nuevo con las manos y dejamos la “costura” en la parte inferior. O sea, viendo hacia abajo.
Metemos al refrigerador por 1 hora para que mantenga su forma por más tiempo.
Decora al gusto con más crema batida y fresas, sirve y disfruta.