La pasta es uno de esos platillos que nos encanta comer por montón y nunca nos cansamos; seguramente más de uno de nosotros ha dicho que bien podría "vivir de comiendo pasta todos los días" y que eso nos mantendría felices. Si así fuera, felices seguramente sí seríamos, ya que es un alimento increíblemente versátil que se puede preparar y combinar de muchas maneras. Sin embargo, la triste realidad es otra. Como dicen las mamás "todo en exceso es malo" y es cierto que excedernos en la ingesta de pastas no es nada recomendable.
La pasta es creada a partir de una masa de harina de trigo con agua, huevo y que mezclamos con vegetales, especias, carne y un montón de cosas más. Es tan querida que incluso acabamos de celebrar su día internacional: el 25 de Octubre se celebró el Día Mundial de la Pasta. Incluso en 2011, una una encuesta de Oxfam reveló que en era uno de los platos más populares en el mundo, por delante de la carne, el arroz y la pizza.
En realidad es muy fácil asumir que no debemos comer pasta todos los días, se sabe, porque es de esos platillos que se eliminan primero cuando tratamos bajar de peso. Tal vez por sus ingredientes puede ser saludable en cierta medida pero, ¿qué tan nutritiva es la pasta?
En realidad, la pasta es nutritiva
Según la Fundación Española de Nutrición, la pasta es en realidad "una excelente fuente de energía. No engorda y previene de la arteriosclerosis". Aunque es cierto y la pasta es una bomba de carbohidratos, es un alimento muy saludable siempre y cuando la incorporemos en una dieta equilibrada, respecto a las cantidades de ingesta, el equilibrio con otros alimentos y con los métodos de preparación adecuados.
“Cuando se consume dentro del contexto de una dieta bien balanceada, rica en nutrientes y de alta calidad, la pasta puede encajar pacíficamente en su vida sin estar reñida con su salud”, explicó la nutricionista Lindsey Kane en el portal Eat this, not that.
Eso sí, es importante cocinarla al dente ya que de acuerdo con Larousse Cocina, cuando la pasta está firme los azúcares se mantienen de absorción lenta y te dan energía de manera prolongada; mientras que si lo cocinamos de manera excesiva, el almidón de la pasta se convertirá en azúcares rápidos, que suelen producir picos de glucemia ( o sea, aumentan los niveles de azúcar en la sangre)
¿La pasta engorda? ¿Qué pasa si comes demasiada pasta?
Andrés Ayesta comentó en Eat this, not that que la única manera de que la pasta influya en el aumento de peso es si se come constantemente en porciones muy grandes:
“Una porción típica de pasta es de 2 onzas secas, lo que equivale a aproximadamente 1 taza cocida... La mayoría de los restaurantes y lugares de comida sirven porciones que suelen ser de tres a cuatro veces más grandes que una porción típica, lo que aumenta fácilmente la carga calórica de la comida”.
En realidad, los conflictos sólo surgen en tanto te excedas con las porciones de pasta. Es importante consumir carbohidratos, como la pasta, pero también es ideal incorporarla a la dieta de una forma equilibrada y sin abusar de su consumo, ya que además de 'aumentar tu peso' también podría provocar una incomodísima indigestión acompañada de malestar físico, debido a que tu cuerpo debe de emplear mayor cantidad de energía para digerir la comida. Por ende, te sentirás cansado y sin energía. Lo que vilmente llamamos acá en México como "el mal del puerco".
Un consumo excesivo de carbohidratos puede además a la larga un factor detonante que te lleve a desarrollar enfermedades como diabetes e hipertensión. Así que, mejor hay que medirnos.
Recuerda, en realidad comer pasta no es malo y comerla no te hará engordar siempre y cuando la mezcles con vegetales y alimentos saludables; sin embargo, debes recordar hacerlo siempre con moderación, ya que los excesos en definitiva sí son malos. También puedes equilibrar tu consumo de pasta comprando fideos de otro tipo de ingredientes, como arroz o chícharos que se encuentran fácilmente en supermercados.
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