¿En dónde se encuentran los derechos de los repartidores? ¿Cómo debe de actuar una empresa de entrega a domicilio? se pregunta la periodista freelance Yanina Otero, quien auxilió a un repartidor de 63 años al que atropellaron, mientras éste se comunicaba con la empresa, misma que respondió de una manera que a miles de personas en redes sociales ha dejado estupefactas.
¿Cómo es la vida laboral de los repartidores de comida? ¿se respetan sus derechos? Seguramente no todos nos hemos preguntado esto cuando hacemos una orden por teléfono o a través de las numerosas aplicaciones que actualmente existen para ofrecernos este servicio.
Este caso se ha hecho viral en redes porque Ernesto "X", un hombre de 63 años, sufrió un atropello vehicular mientras realizaba un servicio y gracias a ello, tanto él, como la sociedad, se dieron cuenta de la carencia de derechos y de humanidad que tienen estas empresas de entrega a domicilio.
Mientras Ernesto se encontraba tirado en el piso con su lesión, aprovechó para comunicarle a la empresa (una app de nombre Glovo, muy común en Sudamérica) sobre lo que había sucedido, y la primera respuesta que obtuvo, después de platicar su situación fue: "¿Cómo se encuentra el pedido?".
Por más triste que parezca, la conversación se desarrolló de la siguiente manera:
Empresa: ¿Está en buen o mal estado para poder ser entregado?
Repartidor: No lo sé, no me puedo levantar.
Empresa: Me esperas un momento por favor? Ernesto me podrías mandar una foto de los productos, por favor.
Repartidor: No, no puedo moverme.
Empresa: Es parte del procedimiento...
La periodista Yanina Otero fue la encargada de socorrer al repartidor y fue quien auxilió a Ernesto en el accidente y con la conversación del repartidor:
Hace un rato socorrí a un repartidor de pizza que lo atropelló un auto. Mientras yo llamaba al Same, el hombre - tirado en el piso y sangrando- avisaba a la app que había tenido un accidente.
— Yanina Otero (@yayaninaa) July 27, 2019
Lo único que le importaba a ellos era el estado de la pizza.
Perverso es poco. pic.twitter.com/ccbZj3ZyLS
Ahora Ernesto y su hijo Nicolás se encuentran en casa mientras Ernesto se está en proceso de recuperación y en buen estado de salud, pero la historia que ocurrió, deja en claro lo poco que este tipo de empresas se preocupan por los derechos de sus trabajadores. Por eso es que la periodista se dio a la tarea de compartir esta historia y hacerla viral para que pongamos un granito de arena y luchemos por una buena causa social.