La Navidad tiene muchos sabores específicos a los que la asociamos sin lugar a dudas; entre el pavo, la pierna de puerco adobada y la ensalada de manzana, yo me quedo con esta sin dudarlo mil veces. Se trata de una ensalada cremosa y muy dulce, que es el postre perfecto para disfrutar mientras la familia abre los regalos.
A mí en particular, esta receta me recuerda a los días posteriores a Navidad en los que mi familia y yo nos la pasábamos en pijama viendo películas y comiendo montones de esta ensalada que mi abuela preparaba únicamente en Navidad. No podíamos desaprovechar esa oportunidad.
Sin duda alguna, seguro en sus familias también pueden compartir esta deliciosa tradición. Para que me entiendan un poco, les compartiré la receta secreta de mi abuela. Les juro que es super adictiva.
Pelamos y picamos las manzanas finamente en cubitos. Reservamos.
En un tazón amplio mezclamos la crema para batir con la leche condensada y cuidamos que queden bien integradas. La leche condensada es opcional, si prefieres que no quede tan dulce puedes omitirla.
Agrega las manzanas e incorpora la crema con cuidado. Agrega los cubitos de piña y cubre bien.
Espolvorea con un poco de nuez picada y sirve en porciones individuales ¡a disfrutar!
