Uno de los postres tradicionales de las festividades en México, son los buñuelos; estos están presentes en casi todas las ferias, kermeses y festejos en pueblos y ciudades durante todo el año, y, como es de esperarse durante las fiestas patrias estos no pueden faltar.
Los buñuelos son una receta 100% de disfrute, es por eso que se consumen como postre o como bocadillo dulce siempre que uno quiere gozar de un momento azucarado acompañado de la familia o amigos.
A pesar de ser una preparación dulce, la receta original lleva un par de ingredientes inesperados, cáscaras de tomate verde y tequesquite; estas se hierven en agua y utilizan como agente de fermentación natural debido a su alto contenido de levadura, esta técnica era utilizada desde la época prehispánica para esponjar la masa de los tamales, ya que en esos tiempos no existía el polvo para hornear, que es el ingrediente actual para cumplir esos propósitos.
Para hacer esta receta necesitaras de un par de ollas de cocina, una sartén antiadherente con aceite hirviendo donde freír y un rodillo para amasar y extender los buñuelos.
- Olla de cocina 899 pesos
- Sartenes antiadherente T-Fal juego de dos 585 pesos
- Cazuela de cocina 449 pesos
- Rodillo para amasar 199 pesos
Preparativos previos
- En una olla con agua poner a hervir las cáscaras de tomate y el tequesquite por 20 minutos y reservar
Para la miel
- En una olla con agua poner a hervir las rajas de canela y el piloncillo moviendo constantemente hasta que el piloncillo se disuelva totalmente y se reduzca el agua a la mitad.
Para los buñuelos
- En una cazuela se hace una fuente con harina y en el centro se pone el huevo, agrega poco a poco el agua de la cascara de tomates y tequesquite y revuelve para formar una masa homogenea.
- Una vez con una masa homogenea, pasala a una mesa donde la puedas amasar, ve agregando la manteca lentamente mientras amasas constantemente hasta que esta comience a burbujear.
Nota cuando la masa se puede extender fácilmente quiere decir que esta en su punto.
- Con la masa en su punto, forma bolitas y déjalas reposar a temperatura ambiente por mínimo media hora.
- Extiende las bolitas con un rodillo al tamaño deseado y fríelos buñuelos en un sartén con aceite hirviendo.
Para consumirse baña los buñuelos con la miel de piloncillo al gusto.
Fotos | Heraldo de México |
Fuentes | El gran libro de la cocina mexicana, De'Angeli Alicia Gironella y De'Angeli Jorge, Ediciones Larousse, México 1988 |
