Este es el verdadero truco para hacer una limonada brasileña cremosa, sin amargor y muy refrescante

Algunas recetas son perfectas para el verano, y la limonada brasileña es una de ellas. A pesar de su nombre original, esta bebida refrescante es muy popular en Brasil y es ideal para disfrutar en los días calurosos. Con solo una licuadora y unos pocos ingredientes, puedes preparar una limonada deliciosa que todos aman. Sin embargo, aunque es fácil de hacer, muchas personas terminan con una limonada amarga y menos cremosa de lo que podría ser.

¿Cómo hacer una limonada brasileña cremosa y sin amargor?

Mucha gente cree que basta con cortar los limones y licuarlos con agua y leche condensada, pero el secreto de una limonada brasileña perfecta está en los detalles. El primer truco es retirar los extremos del limón, tanto la parte superior como la inferior, un paso que a menudo se olvida. Además, es fundamental eliminar completamente el centro blanco del limón, ya que esta parte contribuye al sabor amargo de la bebida.

Otra forma de evitar el amargor es colar bien la limonada, lo que ayuda a retardar ese sabor. Se recomienda preparar solo la cantidad necesaria para consumir al momento, ya que la limonada debe beberse inmediatamente después de licuarla.

Muchas personas creen que cometieron un error en la preparación, pero en realidad, el sabor amargo aparece de manera natural con el tiempo, especialmente si la limonada se deja reposar demasiado en una jarra. Para obtener una textura más cremosa, añade leche condensada y controla la cantidad de hielo, ya que si se usa en exceso, puede diluir la bebida y afectar su cremosidad. Por último, si quieres que la limonada sea aún más refrescante, agrega algunas hojas de menta a la licuadora o un poco de agua con gas justo antes de beberla.