Semillas de calabaza: ¿crudas o tostadas, cuál opción tiene más beneficios?

Las semillas de calabaza son un alimento versátil y nutritivo que se puede consumir de múltiples maneras: en granolas, panes o incluso solas. Pero una duda común entre quienes buscan una alimentación equilibrada es: ¿es más saludable comerlas crudas o tostadas?

La realidad es que ambas formas ofrecen beneficios para la salud, aunque presentan diferencias que vale la pena tener en cuenta.

Beneficios de las semillas de calabaza crudas

Consumir las semillas crudas permite conservar mejor ciertos nutrientes, especialmente la vitamina E, que puede degradarse con el calor. Además, son una opción ideal para quienes prefieren una** dieta libre de ingredientes añadido**s como sal, aceites o condimentos industrializados.

Entre sus beneficios principales se destacan:

• Mayor conservación de antioxidantes

• Ausencia de aditivos como aceites y sal

• Alto contenido de fibra y micronutrientes en su forma original

Ventajas de consumir semillas de calabaza tostadas

Las semillas tostadas también tienen sus propios beneficios. El calor podría ayudar a que digerirlas sea más fácil, ya que elimina compuestos que pueden dificultar la absorción de nutrientes. Además, su textura crujiente y sabor más intenso pueden resultar más atractivos para algunas personas.

Otros puntos a favor:

• Más fácil digestión.

• Absorción más eficiente de ciertos nutrientes

• Sabor más pronunciado y textura crocante

¿Cuál es la mejor opción?

No hay una única respuesta correcta. Elegir entre semillas crudas o tostadas depende del gusto personal, los objetivos nutricionales y la forma en que se incluirán en la dieta. Alternar entre ambas versiones puede ser una buena estrategia para aprovechar distintos beneficios.

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Articulo original de Tudo Gostoso.