Esta receta de masa de elote dulce para hacer los tamalitos más suaves de todos, así que pon manos a la obra para prepararlos y consentir a tu familia con su delicioso sabor.
Esta receta dulce es perfecta para acompañar con tu atole favorito o solo disfrutar de la simpleza del sabor del elote, que naturalmente es es jugosito y tiene cierto dulzor.
Ideas para acompañar los tamales de elote
Los tamales de elote son deliciosos por sí solos, pero acompañarlos con algo adicional como una salsita puede hacer que la experiencia sea aún más deliciosa. Te compartimos algunas ideas de acompañamientos para tus tamales:
Crema o nata fresca: Una crema espesa y fresca o nata le va muy bien a los tamales de elote. Su sabor suave y ligeramente ácido contrasta deliciosamente con el dulzor del tamal.
Miel de abeja o miel de piloncillo: Puedes acompañar los tamales con un toque de miel natural para resaltar el sabor dulce del elote. La miel de piloncillo tiene un toque más robusto y cálido que combina perfectamente.
Frutas frescas: Las frutas frescas como fresas, moras, plátanos o piña hacen un acompañamiento fresco y delicioso. Puedes hacer una pequeña ensalada de frutas o simplemente disfrutar de un par de piezas junto a los tamales.
Chocolate caliente: El chocolate caliente, especialmente uno espeso y espumoso como el que se prepara para acompañar los tamales en muchas partes de México, puede ser una opción perfecta para disfrutar junto con los tamales de elote.
Mermelada de frutas: Una compota de manzana, durazno o frutos rojos puede ser una excelente opción para darle frescura y un toque ácido a tus tamales. Puedes prepararla con un poco de azúcar y canela para darle un giro dulce.
- Desgrana los elotes y licúa los granos con un poco de agua o leche hasta obtener una masa suave. Si usas elote congelado, solo licúa el elote con un poco de agua para que quede una especie de pasta.
- También puedes triturar ligeramente los granos con un procesador de alimentos, dejando algo de textura.
- Mezcla el elote licuado con la mantequilla derretida en un recipiente amplio.
- Agrega el azúcar, la harina de maíz, la leche (un poco a la vez para controlar la consistencia) y el polvo para hornear. Remueve bien hasta obtener una masa suave, húmeda y pegajosa. La masa debe ser fácil de manejar, pero no demasiado líquida.
- Si la masa queda muy seca, agrega un poco más de leche. Si está demasiado húmeda, incorpora un poco más de harina de maíz.
- Agrega una pizca de sal para equilibrar el dulzor. Si deseas un toque extra de sabor, puedes agregar una cucharadita de esencia de vainilla o canela.
- Extiende las hojas de maíz sobre una superficie plana. Coloca un poco de la masa de elote en el centro de cada hoja, formando una pequeña bolita o cilindro. No sobrecargues las hojas para que los tamales se cocinen uniformemente.
- Dobla los lados de la hoja hacia el centro y luego pliega las puntas hacia arriba.
- Coloca los tamales en una vaporera, asegurándote de que queden bien parados y con suficiente espacio para que el vapor circule.
- Cubre los tamales con más hojas de maíz mojadas y tapa la vaporera.
- Cocina a fuego medio durante aproximadamente 1 hora o hasta que los tamales estén cocidos y la masa se despegue fácilmente de la hoja.
- Una vez cocidos, deja reposar los tamales por unos minutos antes de servirlos.
Foto: Wikimedia Commons
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