¿Tienes muchos tejocotes? Esta grandiosa fruta de temporada se da en abundancia en árboles que puedes encontrar en todos varios árboles al rededor de México. Para no desperdiciarlos puedes preparar una rica agua fresca y cremosa de tejocote para aprovechar esta fruta.
Aunque esta agua es fresca y cremosa, puede que quieras algo con el mismo sabor, pero más calentito y espeso; el atole de tejocote es delicioso, reconfortante y definitivamente es tu opción.
Cuáles son los beneficios de los tejocotes
El tejocote es una fruta de temporada con gran valor nutricional. Su nombre proviene del náhuatl “texócotl”, tetl (duro) y xocotl (fruto agrio) que significa “fruto duro de sabor agrio”. Se recomienda comer este pequeño fruto que aporta un gran valor nutricional.
Esta fruta tiene un alto contenido de calcio, que fortalece huesos y dientes, hierro (necesario para producir hemoglobina, la proteína que da el color rojo a la sangre y transporta oxígeno), complejo B, indispensable para el buen funcionamiento del sistema nervioso, así como para el cuidado de la piel, uñas y cabello.
De acuerdo con el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera, el tejocote ofrece los siguientes beneficios:
- Favorece la coagulación sanguínea.
- Es un alimento ideal para los diabéticos, disminuye los niveles de glucosa en la sangre.
- Aporta altos contenidos en vitamina C y calcio.
- Fortalece el sistema inmunológico.
- Es rico en vitaminas del complejo B.
Cómo pelar los tejocotes fácilmente
Muchas personas repelen los tejocotes porque cuando están crudos o en su forma natural, es difícil retirar la cáscara orquesta muy pegada a la carnita de la fruta. ¡No te preocupes! Esta es la forma en la que mi mamá me enseño a pelar tejocotes para el ponche por más de 15 años y nunca me ha fallado.
- Utiliza un cuchillo afilado para hacer un corte superficial en la cáscara de cada tejocote. Esto ayudará a que sea más fácil pelarlos después de cocinarlos.
- Puedes cocinar los tejocotes hirviéndolos en agua. Esto ablandará la cáscara y facilitará el proceso de pelado. Cocina los tejocotes durante unos 15-20 minutos o hasta que estén tiernos.
- Después de cocinarlos, sumérgelos en agua fría o pásalos por agua corriente fría para detener la cocción.
- Una vez que los tejocotes estén lo suficientemente fríos para manejar, utiliza tus manos para pelar la cáscara. Si hiciste los cortes antes de cocinar, la cáscara debería desprenderse con facilidad.
Licúa el tejocote con la raja de canela, la leche evaporada, leche condensada, el agua y opcionalmente 1 cucharada de extracto de vainilla.
Vierte esta mezcla en una jarra con hielo y al momento de servir espolvorea un poco de canela en polvo.
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